La rusa Maria Sharapova conquistó ayer su segundo Abierto de Roland Garros y el quinto título de Grand Slam de su carrera, tras vencer 6-4, 6-7 (5-7), 6-4 a la rumana Simona Halep. La actual número ocho del mundo se impuso en tres horas y dos minutos, apenas 120 segundos menos que la final más larga de la historia, disputada en 1996 por la alemana Steffi Graf y la española Arantxa Sánchez Vicario.

“Es el Grand Slam más difícil que disputé. Halep ha jugado de forma increíble”, afirmó la jugadora de 27 años, que también había obtenido este título en 2012. “No puedo creerlo. Hace años no imaginaba que ganaría un Roland Garros. Ganarlo dos veces es tan emocionante que no puedo expresarlo”, continuó la rusa, que cuenta con 32 títulos en su haber y venció por cuarta vez a Halep en la misma cantidad de enfrentamientos entre sí.

El próximo lunes, la rusa escalará al quinto lugar del ranking femenino, sin riesgos de caídas abruptas hasta el final de la temporada, dado que no defiende más puntos por una lesión que le impidió jugar el segundo semestre de 2013. Con este logro, Sharapova se convirtió en la segunda tenista más ganadora de la historia, en lo que a dinero respecta (30,4 millones de dólares en premios), por detrás de Serena Williams con 56 millones en su haber. Además, acumula 50 victorias en Roland Garros y se transformó en la primera rusa en ganarlo dos veces.

Por su parte, Halep, de 22 años, cuarta preclasificada, perdió su primera final de Grand Slam aunque el próximo lunes escalará hasta la tercera colocación del ranking que maneja la WTA. A pesar de la derrota, la rumana se mostró satisfecha con haber llegado a la definición de un torneo grande por primera vez en su carrera. “Lloré unos minutos. Después sonreí. Pensé que era mi primera final de Grand Slam e hice todo lo que pude en la pista. Estoy muy contenta de cómo he jugado”, indicó Halep.

A diferencia de lo que viene ocurriendo en el circuito femenino, con un marcado bajón de calidad, la final de ayer mostró un excelente nivel. Por eso, la rumana elogió a su rival. “Maria se movía muy bien. Creo que fue un gran partido, una gran final. No esperaba que durase tres horas, pero estoy muy contenta. Había una atmósfera increíble”, agregó la joven tenista, que tuvo al público de la Philippe Chatrier a su favor. Igual, con el resultado consumado, París se rindió ante la nueva campeona.