El presidente de Vélez, Raúl Gámez, defendió ayer su sistema de “negociar” con los barrabravas de su club: “Si no me sacan a los violentos, voy a seguir dando entradas”. Y después también explicó, en declaraciones televisivas: “Uno, como dirigente, no puede controlar que entren tres mil tipos gratis. No puedo pararme en la puerta y decir ‘éstos no entran’. Me llevan para adentro con ellos. Yo a los de Vélez les doy entradas y lo hago en función de que esto vaya ordenado. Yo pacto, no sé lo que hacen otros dirigentes...”.
Gámez, que hoy deberá prestar declaración ante el juez Mariano Bergés, adelantó su actitud: “Al juez le voy a ser franco, no tengo por qué mentir. Yo, hasta que no me saquen la violencia, sigo con este sistema porque es el que más resultado me da”. Y agregó: “Este sistema no me deja que entren otros marginales que me compliquen más la vida. Podemos pagar las consecuencias, pero sabemos que estamos ante un juez duro, serio, que conoce bien el tema y que quiere mejorar la cosa”. Además, Gámez hizo referencia a las expectativas que abre este proceso: “Si tenemos una justicia en ese sentido y de esa forma, vamos a terminar con la violencia. Si no, no, por más que Castrilli se esfuerce”. Precisamente, sobre el ex árbitro, dijo: “Que Castrilli esté al frente, por su trayectoria como árbitro, también es muy bueno. Su dureza hace falta para esta situación. Estamos en el buen camino, pero no sé si van a poder”.
En relación a los sistemas de seguridad, el directivo apuntó: “Nosotros gastamos mucha plata en los sistemas de video, en las entradas magnéticas. Nunca fueron efectivas. A nosotros nos obligó la gente de Miguel Angel Toma. Luchaban para que pusiéramos un sistema que no es el que tenemos nosotros. Puede ser un negocio de estos tipos. Por eso es bueno que no aparezcan nunca más”. Respecto de su proyecto de que a los estadios ingresen solamente simpatizantes del club local, Gámez indicó: “Cuando se toma una determinación de este tipo, a alguien se castiga. Pero evidentemente, si eso soluciona la violencia y las muertes, yo estoy dispuesto”. Y remarcó que hay “mucha gente que está castigada ahora y que no va a la cancha por miedo a la violencia”. Y aclaró: “Esa va a volver”.
Gámez también recordó sin pudores sus tiempos de hincha de la tribuna y explicó cómo obraban: “A algunos que venían a sacar algún tipo de ventaja, nosotros los sacábamos. Nos buscábamos entre los tipos que queríamos pelear, se buscaban las barras y se encontraban, se peleaban quince minutos y terminaba la historia ahí”.
En cuanto a la relación que tenían con la policía, Gámez señaló: “Los respetábamos y ellos respetaban nuestra forma. Si el otro día en la cancha de Boca la policía reprimía, hoy lamentábamos víctimas fatales. Se ve por televisión la gente que entra gratis a la cancha, pasa por arriba de los controles y de la policía. Si no le encontramos una solución a eso, por más castigos que nos pongan, por más sanciones duras que vengan, no lo vamos a controlar”.