Racing estrenó de la mejor manera su título de campeón con un clarísimo triunfo 4-1 ante Boca, que se suicidó en la primera mitad por las prematuras expulsiones de Cristian Erbes y Leandro Marín. Y Gustavo Bou, como en el torneo pasado, también se mostró implacable, al anotar tres goles y servir el restante a Diego Milito.

Nadie podía predecir lo que sucedería cuando antes del minuto Boca se puso en ventaja con una jugada insólita, con varios rebotes y un toque de Jonathan Calleri que dejó sin chances a Saja. Sin embargo, la improvisada zaga central de Boca, con Claudio Pérez y el devenido en defensor Federico Bravo, muy pronto dejó en claro que no iba a estar a la altura del compromiso. Con el simple argumento de tirar la pelota a las espaldas de los centrales, Racing podía colocar un jugador frente a Orion. Así lo hizo con Bou, pero el goleador no pudo en la primera chance que tuvo frente al arquero.

Claro que en la siguiente no falló, y ahí cambió el partido. Las buenas intenciones de Boca del arranque, con el movedizo Pavón y la dinámica de Meli, rápidamente quedaron en el olvido. A partir del empate, Racing se adueñó del partido y, aprovechando todos los problemas defensivos de Boca, llegó al segundo tanto a través de Milito, que recibió una asistencia de Bou.

Si algo le faltaba a Boca, la infantil reacción de Erbes terminó de complicarlo. Molesto por un caño de Centurión, el volante central lo esperó para golpearlo y se llevó la roja. Y casi de inmediato, Marín le metió un planchazo descalificador desde atrás al talentoso extremo de Racing y también se fue expulsado. De ir ganando al minuto, Boca pasó a perder y a quedar con nueve hombres en menos de media hora.

A partir de allí, el partido se desvirtuó totalmente, con un Racing seguro y dominador, que manejó todo con tranquilidad y hasta se dio el lujo de evitar entrar en conflictos. Ni siquiera necesitó forzar la máquina para aumentar el marcador, ya que una pifia de Pérez y la mala respuesta de Orion le alcanzaron a Bou para colocar el 3-1 antes del final del primer tiempo.

El partido ya estaba resuelto y la segunda parte estuvo de más. Por inercia, el conjunto de Cocca aumentó el marcador, luego de una magnífica maniobra de Brian Fernández, que terminó resolviendo Bou. A esa altura, lo único que pretendía Boca era que el partido terminara y que no le convirtieran más goles. Y hasta pareció que el campeón se apiadó y, por eso, el resultado no fue más abultado.

4- RACING

Saja; Pillud, Cabral, Lollo, Grimi; G. Díaz, Cerro, Aued, Centurión; Milito, Bou. DT: Diego Cocca.

1- BOCA

Orion; Marín, Bravo, C. Pérez, Colazo; Erbes, Gago, Meli; Pavón, Calleri, Chávez. DT: Rodolfo Arruabarrena.

Estadio: José María Minella.

Arbitro: Patricio Loustau.

Goles: 1m Calleri (B); 16m Bou (R); 23m Milito; 43m y 71m Bou (R)

Cambios: 35m Acuña por Centurión (R); 38m Fuenzalida por Pavón (B); 45m P. Pérez por Chávez (B); 68m B. Fernández por Milito (R) y Acevedo por Aued (R); 83m Castellani por Gago (B)

Incidencias: 24m expulsado Erbes (B); 29 expulsado Marín (B).