La moda de contratar entrenadores argentinos no se frena: con el arribo de Ricardo Gareca a la Selección de Perú, la mitad de los participantes de la Copa América tendrá seleccionadores de esa nacionalidad. Gareca (“es el desafío más importante de mi vida, creo en el futbolista peruano”, dijo al ser presentado ayer) se suma a la lista que encabeza Gerardo Martino, entrenador de la Argentina tras la Copa del Mundo de Brasil 2014. Con la experiencia de haber dirigido en el pasado Mundial, también se encuentran en la nómina José Pekerman, en Colombia, y Jorge Sampaoli, en Chile. Y para completarla, en los últimos meses se agregaron Ramón Díaz, en Paraguay, y Gustavo Quinteros, nacionalizado boliviano, en Ecuador.

Martino arribó a la Selección Argentina después de su paso por el Barcelona y como un último deseo de Julio Grondona. “La Argentina tiene la obligación de salir campeona” ha repetido el rosarino en las últimas semanas. Su equipo, subcampeón del mundo en Brasil 2014, aparece como gran candidato.

La continuidad de Pekerman en Colombia y Sampaoli en Chile se confirmó después de los buenos papeles de ambas selecciones en Brasil 2014. “Un cuerpo técnico como el del profe Pekerman nunca piensa en no ganar. Pekerman trabaja para ser el mejor o lo mejor posible, como se hizo en Brasil. Pekerman era el plan A, B y C de esta federación”, expresó Luis Bedoya, presidente de la Federación Colombiana de Fútbol, para justificar la continuidad del argentino.

En Chile, Sampaoli tenía vínculo firmado sin importar lo que sucediera en Brasil. Igualmente, el titular de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional, Sergio Jadue, le ratificó toda su confianza. “Sampaoli tiene contrato vigente hasta Rusia 2018. Hay que tener confianza en que podremos conseguir el objetivo que nos planteamos. Haremos las cosas de modo que para Sampaoli quedarse aquí sea su mejor opción. Mi intención y mi esfuerzo serán para que él cumpla su contrato”, afirmó el dirigente tras el Mundial.

Luego de 15 meses de interinato de Víctor Genes, Paraguay finalmente se decidió por Ramón Díaz. El 4 de diciembre fue presentado por el titular de la Asociación Paraguaya, Alejandro Domínguez, a partir de la recomendación del ex presidente de Olimpia Osvaldo Domínguez Dibb. “Fue Osvaldo, que me sugirió el nombre. Luego de eso empecé a hacer las primeras consultas del caso, e inclusive hablé con Mauricio Macri del tema”, afirmó Domínguez en aquel momento.

En Ecuador, el bicampeonato del Emelec catapultó a Quinteros a la selección tricolor. “Tenemos el técnico que la Federación quería, un técnico ganador en todos los equipos en que ha estado, un técnico con mentalidad positiva, un técnico bicampeón del fútbol ecuatoriano”, afirmó el presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, Luis Chiriboga, cuando presentó al argentino nacionalizado boliviano al frente del equipo el 29 de enero.

Brasil, con Dunga; Uruguay, con Oscar Washington Tabárez; Bolivia, con Mauricio Soria; y Venezuela, con Noel Sanvicente, son las únicas cuatro federaciones sudamericanas que no tienen un técnico argentino. En la Copa América se sumarán México, con Miguel Herrera, y Jamaica, con el alemán Winfried Schäfer.

Héctor Cúper fue designado ayer como seleccionador de Egipto. Pero el auge de entrenadores argentinos no se limita a las selecciones nacionales. En Europa se destacan los renombrados Diego Simeone en el Atlético Madrid y Marcelo Bielsa en el Olympique Marsella, que pelean las ligas de España y de Francia con sus respectivos equipos.

En Sudamérica, cinco de los diez técnicos campeones de liga en la última temporada fueron argentinos: Diego Cocca se coronó con Racing, Gustavo Costas festejó con el Independiente Santa Fe, en Colombia; Daniel Ahmed se consagró con el Sporting Cristal, en Perú; Horacio Matuszyczk lo hizo con Trujillanos, en Venezuela, y Quinteros celebró el bicampeonato de Emelec, en Ecuador. El buen presente de los argentinos también se puede extender a México, donde Antonio Mohamed coronó al América antes de dejar el club en diciembre, o a Honduras, donde Diego Martín Vázquez condujo a Motagua al título del Torneo Apertura.