Con un equipo mixto tras asegurar su pase a octavos de final de la Copa Libertadores, Racing consiguió su cuarto triunfo consecutivo como local al superar a Huracán, con dos goles que llegaron en el segundo tiempo: Nicolás Sánchez, a los 75 minutos, y el uruguayo Carlos Núñez, a los 80. Huracán, que el miércoles próximo jugará con Cruzeiro de Brasil, también por Copa Libertadores y que por eso reservó varios jugadores, sufrió la expulsión de Sotelo, a los 44 minutos. Racing, que suma ahora 16 puntos y mantiene un invicto de ocho partidos, perdió en el debut con Central, en Avellaneda, y luego ganó cuatro partidos de local (Temperley, Colón, San Martín de San Juan y Huracán) y empató cuatro de visitante (Olimpo, Atlético Rafaela, Defensa y Justicia y Estudiantes de La Plata). Huracán, por su parte, reúne apenas 7 unidades (dos triunfos, un empate y seis derrotas) y registró su tercera caída consecutiva, quinta como visitante en otros tantos partidos. Venía de perder con Boca en su estadio. El equipo de Diego Co-cca ganó con justicia, sobre todo por lo que realizó en el segundo tiempo, lapso en el que con ventaja numérica tuvo dominio territorial, control de pelota y más llegada a la valla de Marcos Díaz.

El primer tiempo fue para el olvido sin una situación digna de gol. En ese contexto Racing fue un poquito mejor, ya que al menos tomó la iniciativa, mientras Huracán esperaba en su campo sin pretender mucho más que no pasar apurones, y con poco volumen como para pesar en el área de Saja. Pero el local no resolvió de tres cuartos de cancha hacia adelante porque Brian Fernández quedó muy aislado arriba.

La expulsión de Sotelo por doble amarilla, la segunda por un puntapié al paraguayo Oscar Romero, terminó por inclinar la balanza para el local, ya que en el segundo tiempo Racing tuvo más profundidad. Acuña, Fernández y Bou tuvieron sus chances hasta que luego de un tiro de esquina Sánchez abriera el marcador, anticipándose a su marcador; el furibundo cabezazo se metió en el primer palo de Díaz. La apertura del marcador parecía liquidar el partido: con un hombre menos, sin peso ofensivo, con escaso control de la pelota (apenas 37contra casi el 63 por ciento del local durante los 90 minutos), Huracán estaba lejos de pretender alcanzar la igualdad. A lo sumo podía esperar que la derrota no se tornara catastrófica. Por ese camino quiso ir el uruguayo Discoteca Núñez, a esa altura el mejor jugador del encuentro, que de contraataque, en buena jugada individual, luego de una exacta habilitación de Camacho, dejó tirado a Díaz para poner el 2-0 con un tiro cerrado cerca del palo derecho. Un instante después se perdió el tercero. El historial de este viejo choque registra ahora 65 triunfos de la Academia, contra 35 de Huracán y 43 empates en 143 partidos.