El seleccionado argentino Sub-20 quedó ayer eliminado del Mundial de Nueva Zelanda tras igualar sin goles ante Austria, en Wellington, y de no haber podido triunfar en sus tres partidos del Grupo B. El equipo dirigido por Humberto Grondona no pudo, siquiera, quedar entre los cuatro mejores terceros de los seis grupos del certamen, ya que sumó dos empates y una derrota en sus tres presentaciones. El encuentro ante los austríacos, desarrollado en el Wellington Regional Stadium, selló la eliminación porque en cuatro de los seis grupos de la fase inicial todos los terceros sumaron, al menos, tres unidades.

El equipo nacional debía ganar y esperar los resultados de otros encuentros, luego de haber empatado en dos goles con Panamá en la primera jornada, el 30 de mayo, y caer 3-2 ante Ghana, el martes pasado.

El entrenador del seleccionado, Humberto Grondona, admitió ayer que fue un “fracaso” la eliminación en primera ronda del Mundial, aunque remarcó que el ciclo en su totalidad fue “exitoso”. Al mismo tiempo, el conductor del equipo juvenil consideró que Argentina no mereció quedar fuera de competencia tan rápidamente y trazó los objetivos inmediatos, dejando en claro que su intención de ningún modo es dejar el cargo. “Es un fracaso, totalmente. En el resultado, fracasamos, pero el ciclo fue exitoso”, afirmó el técnico.

Y agregó: “Este grupo merecía terminar mejor, pero lo positivo es que ellos (los jugadores) terminan este Mundial, vuelven a sus clubes y están en Primera, y con el tiempo quizás estén en una Selección Argentina”.

Grondona, quien se quedó con “una sensación de amargura” tras conocer el destino de su equipo, lamentó haber desperdiciado chances de gol. “En el Sudamericano de Uruguay se hicieron los goles, y por eso marcamos diferencias. Acá no. Si bien podíamos haber hecho goles, no fuimos tan contundentes como en otros partidos”, evaluó.