Pudo ser su segunda medalla de oro. Federico Grabich la perdió por apenas 1s2 ante el brasileño Joao De Lucca en la final de los 200 metros libres, un día después de haber ganado la dorada en los 100 metros libres en la pileta del Centro Acuático de Toronto. La marca le alcanzó al formidable nadador argentino no sólo para obtener la plata sino para batir el record argentino en la distancia. El Tiburón Grabich cosechó ya la misma cantidad de medallas que la natación argentina ganó en los dos Panamericanos pasados y con mejor color: plata y bronce era el antecedente.