César René Cuenca hará esta tarde, en la remota Rusia, la primera defensa de su título welter junior de la Federación Internacional de Boxeo. Su rival será el peleador local Edward Troyanowski en una pelea a 12 rounds que se realizará en el Basket Hall Arena de la ciudad de Kazan (la octava más poblada del país, con 1.500.000 habitantes) y que TyC Sports transmitirá en vivo desde las 11.30.

Será un duelo de zurdos e invictos con características opuestas. Cuenca, de 34 años, lleva una serie de 48 triunfos consecutivos (apenas 2 antes del límite) y, de ganar esta tarde, igualará la marca con la que Floyd Mayweather abandonó el boxeo. En tanto que Troyanowski, de 35 años, acumula 22 triunfos al hilo, 19 de ellos por la vía rápida. O sea, será un duelo renovado entre un boxeador como Cuenca, habilidoso, fino, talentoso y dueño de las mejores piernas del pugilismo argentino, y otro como Troyanowski, que apuesta al poder anestesiante de su pegada.

Cuenca lució todas sus virtudes en julio pasado cuando en China venció al local Ik Yang y se alzó con la corona. Su ágil traslado sobre el ring, su anticipo de derecha y su izquierda cruzada resultaron imparables para su adversario. Hoy deberá hacer lo mismo, pero con un agregado: Troyanowski tiene las manos pesadas y aprovechará cualquier descuido del campeón para hacérselas sentir.

En el record del desafiante ruso no aparecen grandes nombres. Pero ha ganado por fuera de combate sus últimas nueve peleas, dos de ellas ante rivales de cierto calibre como el nicaragüense José Alfaro (a quien Cuenca venció en 2006) y el armenio Aik Shaknazaryan, lo que obliga a considerarlo con respeto. Es el local, pega muy fuerte y ésos son sus créditos para alcanzar la victoria. Pero Cuenca sabe boxear muy bien. Y además, no se deja intimidar por la condición de visitante. Más que suficiente como para confiar en él a la hora de la previa.