DEPORTES
› LA CAIDA EN LA COPA ANTE EL CIENCIANO ALTERO MAS TODAVIA EL CLIMA INTERNO DE RIVER
Yo me voy, vos te vas, él se va y aquel viene
Pellegrini no sigue, pero dice que no renuncia. Aguilar no lo echa, aunque presiona para que dimita y asegura que todavía no piensa en la sucesión. Macchi afirma que el elegido es Astrada, que llega el martes y ya pidió refuerzos.
A River finalmente se le dio el peor panorama posible. A los recientes logros de Boca se le sumó una nueva frustración al perder la final de la Copa Sudamericana con el Cienciano, por lo que el clima en el regreso a Buenos Aires fue cargado de broncas y contradicciones. Por un lado, el entrenador Manuel Pellegrini aseguró que no seguirá en su cargo, pero a la vez aclaró que no va a renunciar y que busca una salida consensuada. Desde el otro sector, el presidente José María Aguilar destacó que para hablar de un nuevo entrenador primero pretende reunirse con Pellegrini para saber las condiciones de su partida, aunque también hizo referencia a que el técnico había dicho que si perdía la Copa presentaba su dimisión. Para agregar más confusión, el vicepresidente Julio Macchi señaló que Leonardo Astrada es el principal postulante a suceder al chileno, aunque no el único candidato. Lo curioso es que esa afirmación llega cuando ya se sabe que Astrada llegará el 8 de marzo para hacerse cargo del equipo.
Más allá de la coincidencia en la necesidad del cambio, la diferencia de las partes está en las formas. Mientras que Aguilar no pretende asumir el costo político de un despido, Pellegrini no le quiere allanar el camino con una dimisión. “Hace un tiempo, Pellegrini dijo que si no ganaba la Copa Sudamericana, se iría de River. Y yo siempre he pensado que las renuncias son indeclinables. Al menos, eso es lo que me enseñaron”, afirmó Aguilar, en una clara demostración de que no quiere ningún tipo de trabas de parte del entrenador para alejarse de su cargo. Pellegrini tiene en claro en que no va a seguir siendo el técnico pero todavía intenta sacar una salida favorable: “No es una renuncia. Yo no voy a renunciar, pero pienso que en este momento no soy la persona indicada para darle tranquilidad a River. Hace un mes y medio dije que si no ganabámos la Copa Sudamericana no era conveniente seguir en el cargo y hoy sigo pensando lo mismo”, señaló el ingeniero no bien se consumó la eliminación en Perú.
Planteado en esos términos, la reunión entre ambos es clave para definir la salida. Por eso, el presidente de River primero quiere resolver esa cuestión, antes de ponerse a pensar en el futuro. “Yo comprendo la ansiedad de la prensa y de los hinchas por saber quién será el técnico de River, pero yo no voy a hacer nombres antes de reunirme con Pellegrini. Quiero hablar con Pellegrini mano a mano, como corresponde, para hacer un análisis de su gestión. Se lo merece”, explicó Aguilar, golpeado como pocas veces luego de la derrota ante el Cienciano. Incluso, el dirigente intentó minimizar los contactos que ya mantuvo con Astrada, a quien todos en River dan por descontado que será el reemplazante de Pellegrini. “Con Leo nos juntamos muy a menudo, pero eso no quita ni agrega nada”, señaló Aguilar.
Pero mientras el presidente desde Perú intentaba bajar los decibeles de la sucesión, el vice Macchi dio a entender que el elegido es Astrada. “Está adelante de todos. Por lo que opina la gente, sería la opción más conveniente y útil. El se crió en el club, conoce todos los rincones y la intimidad del vestuario”, señaló el directivo en el programa Dos de punta. Lo curioso es que en ese punto se focalizó la contratación de Pellegrini hace un año y medio, cuando la dirigencia pretendió cambiar el estilo de las últimos conductores, en especial Ramón Díaz. En aquel momento, fue el principal argumento para elegir al chileno. Y a partir de los pobres resultados, la opinión de Aguilar cambió de manera rotunda. “Siempre es mejor que el técnico sea alguien de la casa, más allá de que en su momento, cuando llegó Pellegrini, optamos por una persona que no era del riñón riverplatense”, comentó el presidente.
Más allá de las contradicciones, lo que sí parece seguro es la llegada de Astrada. En el club manejan el dato de que el ex volante central arribará el martes a Buenos Aires de sus vacaciones en Miami y que el 8 de enero se hará cargo del plantel. Y si bien la intención del técnico elegido era cambiar el lugar de la pretemporada, finalmente deberá conformarse con hacerla en Mendoza porque los dos primeros partidos del equipo en los torneos de verano se jugarán en esa ciudad. Además, seconoció una lista de posibles refuerzos que habría pedido Astrada, en la que están los defensores Paulo Ferrari, Claudio Morel Rodríguez, Cristian Alvarez y Daniel Díaz, el volante Lucas Pusineri y el delantero Ernesto Farías.