El entrenador de la Selección Argentina de básquetbol, Rubén Magnano, manifestó que si bien conseguir una medalla en los Juegos Olímpicos de Atenas será difícil, ese objetivo no es una utopía. “Será difícil, pero llegar al podio olímpico hoy no es una utopía. Nosotros sabemos dónde estamos y cuál es nuestra posición. Tenemos el compromiso de hacer un buen papel, pero sabemos que estamos en un lote de equipos muy parejos, en el que una victoria o una derrota te llevan a una medalla o te hacen caer al octavo puesto”, señaló Magnano.
De acuerdo a la visión del entrenador, el equipo puede rendir incluso más que en el Mundial de Indianápolis. “Este grupo ganó experiencia en cada torneo y si sigue trabajando con humildad y solidaridad puede alcanzar nuevos objetivos. Los jugadores argentinos crecen en lo deportivo y en lo humano cada día por las exigentes competencias en las que intervienen y eso ayuda a la Selección”, indicó Magnano, que aclaró que la Selección ahora cargará con una presión extra ya que los rivales reconocen el potencial del equipo. “En el Mundial fuimos sorpresa, porque si bien teníamos muy buenas individualidades, no sabían cómo podíamos responder como equipo. Ahora la situación cambió y en los rivales despertamos respeto. Estará en nosotros que nos preparemos bien para luchar contra ese respeto”, comentó el entrenador cordobés.