Christian Bassedas confirmó ayer a la mañana en conferencia de prensa su renuncia como entrenador de Vélez, tras la dura derrota del sábado ante Racing por la cuarta fecha del torneo de Primera División, que llegó después de la caída en el clásico frente a San Lorenzo.

El técnico sostuvo que es el “máximo responsable” por el mal momento del equipo y argumentó que el club está “por encima” de “egos personales”. Vélez acumula malos resultados y empieza a mirar con mayor preocupación la zona baja de los promedios que determinan los descensos. “Simplemente doy un paso al costado. Siento que es el momento, con el dolor que conlleva en mí. No es una historia que termina como uno la soñó, pero Vélez está por encima de mí”, dijo Bassedas. El ex mediocampista de Vélez y de la selección argentina, que a su vez fue manager del club en el ciclo de Ricardo Gareca en el banco del Fortín, sostuvo que el equipo “está a tiempo de reaccionar” y que quizá lo logre “a través de otro mensaje u otro modo de conducción”.

“Uno no consiguió los resultados deseados y en las formas tampoco me ha gustado. Soy el máximo responsable y no tengo mucho más para decir que desearle lo mejor a Vélez, venga quien venga, y también agradecerle a la hinchada”, añadió Bassedas, que en la caída 3-0 ante Racing sumó la tercera derrota en el torneo, en el que sólo ganó un partido.

El presidente de Vélez, Raúl Gámez, admitió que la dirigencia también tuvo responsabilidad en la renuncia de Bassedas y que el entrenador “pagó las consecuencias” de los cuidados que debió tener el club en el último mercado de pases a raíz de su situación financiera. “Los dirigentes sabemos que tenemos culpas en todo lo que pasó este año. (Bassedas) pagó las consecuencias, nos pidió jugadores que no le trajimos y otros que sí, pero que se los trajimos a último momento y sin el entrenamiento ideal”, dijo Gámez, que intentó revertir la decisión del entrenador.

El presidente de Vélez señaló que su idea era que Alberto Fanesi, actual coordinador general de fútbol amateur, sea el director técnico interino hasta que se contrate a un nuevo entrenador. Esa idea se hizo realidad en la noche de ayer.