Todo le sonríe a San Lorenzo en esta temporada. Entonado por su buen momento, en el que combina contundencia y solidez, es el único equipo argentino que participa en una triple competencia: ocupa el segundo puesto en el torneo local, obtuvo su pase a los cuartos de final de la Copa Argentina, y le ganó a Palestino el duelo de ida por los cuartos de final de la Copa Sudamericana. El miércoles próximo jugará la revancha en Chile, y tiene muchas chances de ubicarse entre los cuatro mejores del certamen. El partido de anoche lo definió en el primer tiempo, debido a que a los seis minutos estaba en ventaja por el cabezazo de Martín Cauteruccio, que también está en un gran momento luego de sus tres goles ante Arsenal, el domingo pasado.

El segundo tanto llegó apenas pasada la media hora, cuando Blandi finalizó una gran acción colectiva, tocando la pelota en la puerta del área chica. La diferencia en el resultado pudo haber sido más abultada, pero el conjunto local desperdició muchas posibilidades frente al arco defendido por Melo.

El técnico Diego Aguirre, a medida que se acercaba el final del partido, decidió sacar a sus goleadores, Cauteruccio y Blandi, seguramente para que puedan llegar en mejores condiciones físicas al partido que afrontará el domingo que viene frente al líder Estudiantes, en donde intentará llegar a la cima del torneo local.

Belluschi y Blanco fueron los que mejor rendimiento tuvieron anoche frente a los chilenos, y a partir de su fútbol el equipo se hizo dominador absoluto del desarrollo. De esa manera, todo el andamiaje volvió a tener un nivel muy alto.