Los escoltas de River quieren ponerle presión al líder del Clausura, River, aprovechando la oportunidad de jugar sus partidos de la octava fecha del torneo 24 horas antes que el equipo de Núñez. Después de cuatro victorias consecutivas en las cuatro últimas fechas, que redujo a solo cuatro puntos la diferencia con el puntero, el campeón del fútbol argentino sueña con el quinto triunfo consecutivo. Pero no será el único, ya que Gimnasia tiene a mano la chance de alcanzar transitoriamente a River si vence a Newell’s en el Parque Independencia, en una jornada en la que se jugará la mitad de la fecha –para no restarle seguridad a las movilizaciones de mañana en ocasión del nuevo aniversario del golpe de Estado de 1976– y que significará el regreso de César Menotti al banco de suplentes, en este caso dirigiendo a Rosario Central, el club del que el entrenador se confiesa hincha.
“Todavía no pensamos en el campeonato. Sabemos que empezamos mal el torneo Clausura, por suerte, levantamos y ahora hay que seguir en este camino”, sostuvo Gabriel Loeschbor, una de las figuras racinguistas.
“River viene muy bien. Por eso, tenemos que tratar de que los que están arriba no se nos escapen, esa es la idea, y para eso debemos seguir sumando de a tres puntos”, puntualizó el defensor.
“En el fútbol argentino no hay misterios, todos sabemos como juega San Lorenzo, los futbolistas que tiene. Por eso, hay estar ordenados para conseguir el resultado que queremos”, señaló. “San Lorenzo viene bien, ojalá que salga un lindo partido y que podamos conseguir un buen resultado para seguir estando en la lucha”.
En San Lorenzo se toman el partido con otra calma. “No siento que sea algo especial aunque hayamos perdido por goleada en el Apertura del año pasado”, sostuvo Manuel Pellegrini, el entrenador
“Los jugadores y nosotros estamos muy bien anímicamente a pesar de la derrota en Ecuador ante El Nacional. Sabemos que en cada partido damos lo máximo, aunque juguemos bien o mal” agregó.
El chileno se refirió a las posibilidades de pelear el Clausura: “Hasta que el puntero no nos saque cuatro puntos faltando una fecha, habrá posibilidades”, dijo Pellegrini.
A Mataderos llegará Central con su nuevo entrenador, César Menotti, aunque el equipo no traerá demasiada escolta: apenas 200 barrabravas. Es que el grueso de los hinchas del equipo rosarino teme represalias después de que, en el partido que ambos equipos disputaron en el Apertura, los Pillines, la barra de Central, le robara una bandera a la barra de Chicago. Menotti, de 62 años, dirigirá por primera vez al equipo en el que surgió como futbolista en 1960. El último club al que dirigió en el fútbol argentino fue Independiente, en 1998. Completan la jornada los partidos Unión-Huracán y Belgrano-Colón.