DEPORTES
› GANABA 1-0, PERDIA 2-1, GANO 3-2 EN EL DESCUENTO
Heroica victoria de River
Con dos goles de Cavenaghi, el equipo de Astrada remontó una derrota que era injusta y ahora lidera el Grupo 6 de la Libertadores.
No debió sufrir tanto para ganar, porque el fútbol que desplegó a lo largo de la mayoría de los 90 minutos justificaba la victoria. Pero cinco minutos fatídicos, que su rival aprovechó para dar vuelta el partido, lo obligaron a penar hasta el preciso final, en el que terminó siendo Torazo en rodeo ajeno, porque con dos goles de Fernando Cavenaghi, el segundo en tiempo de descuento, River consiguió imponer la justicia que el marcador reclamaba, ganarle 3-2 al Tolima como visitante y encaramarse a la punta del Grupo 6, con 7 puntos, delante del Táchira (5), el Tolima (2) y Libertad (1).
Los hinchas de River esperaban el partido en Colombia alentados por la fabulosa demostración que el equipo había concretado en el Monumental ante Independiente. Y, durante el primer tiempo, salvo por la falta de gol, los jugadores hicieron delirar a sus hinchas. Tacos, lujos, rotación y desmarque, todos los capítulos del libro del buen juego fueron repasados por los jugadores de Astrada frente a un equipo desdibujado.
¿Qué le pasaba al equipo argentino que no pudo concretar ninguna de las chances de las que gozó en ese primer período? Le faltaba justeza, porque las situaciones llegaron desde todas las variantes.
Lo de River era tan superior que parecía que el segundo gol llegaría antes que el primero. Pero la apertura no llegaba nunca. Por eso fue que Astrada se animó a imprimirle un sesgo más audaz al equipo, sacando en el entretiempo a Pereyra y mandando al campo a Gallardo. Y aunque el volante no participó de la jugada, que el gol tan ansiado se concretara apenas cinco minutos después pareció una recompensa a la actitud. Pelotazo de Salas al área, toque atrás de Cavenaghi y el bombazo de Montenegro que dobló las manos de Gómez.
Pero ese gol fue una bisagra. River debió haber rematado el partido, pero se quedó. El Tolima acertó el empate tras una serie de rebotes en Costanzo, el palo y Fernández, que Ciciliano alcanzó a embocar en el arco visitante, y sorpresivamente, tres minutos más tardedio vuelta el partido cuando Peña, el mejor defensor local, acertó un cabezazo.
Ya River no era el mismo equipo lujoso del primer tiempo, ni los colombianos el once ausente del arranque. Cavenaghi avisó con un tiro en el travesaño, pero los nervios se comían al equipo argentino. Hasta que el delantero consiguió el empate, cuando se desvió en Salas. Y aprovechó luego un pase de Ameli para anotar de volea el gol de la victoria. Ese gol por el que River no debió haber sufrido tanto.