DEPORTES
Al fútbol argentino no le pidan que apague la luz
Un proyecto de ley que tratará la Legislatura porteña prohíbe los espectáculos que demanden el uso de torres de iluminación en la Capital Federal. Desde la AFA dicen que la norma no los afecta, ya que los clubes tienen sus propios generadores y no utilizan la red energética, pero los grupos electrógenos apenas alcanzan para cubrir el 60 por ciento de la demanda.
› Por Gustavo Veiga
Al fútbol no le pidan que apague la luz. La crisis energética parece un problema ajeno a los clubes, a la AFA y a la productora en que se apoya el exclusivo negocio de la televisión, Torneos y Competencias (TyC). Sin embargo, un proyecto de ley les acaba de recordar a dirigentes y empresarios que su industria sin chimeneas debe tomar medidas para un uso racional de los recursos. La iniciativa parlamentaria del diputado porteño Milcíades Peña hizo que se atragantaran unos cuantos y puso en funcionamiento al lobby de los afectados por una norma que, dos pesos pesado como Julio Grondona y Mauricio Macri, coincidieron en cuestionar.
Cada semana son transmitidos seis partidos nocturnos de los torneos locales, o sea, unos veinticuatro por mes, sin contar los que se disputan por la Copa Libertadores. En la AFA argumentan que esa demanda de iluminación se cubre con generadores propios o alquilados, abonados por las instituciones o TyC, según de qué encuentros se trate. Pero en algunos sectores del Gobierno no habría caído bien la actitud confrontadora de la corporación futbolística e incluso se cuenta con datos de que la red de electricidad sería utilizada igual en algunos estadios. Por eso, este conflicto amenaza con prolongarse si se extiende la emergencia energética.
El proyecto de Peña debía tratarse la semana pasada aunque, desde su oficina de prensa, se informó que los diputados de Compromiso para el Cambio, la fuerza política que responde al ingeniero Macri, no respetaron lo acordado entre los presidentes de bloque: el tratamiento en la Legislatura. La norma, que prohíbe por un año la realización de espectáculos que demanden la utilización de torres de iluminación en la Capital Federal, recién podría ser discutida en un mes, ya que pasó a varias comisiones para su estudio.
Un día antes del frustrado debate, Grondona había recibido en su despacho a cinco diputados ávidos de escuchar sus iluminadas explicaciones: Santiago de Estrada, Diego Santilli, Ricardo Bussaca, Jorge Mercado y Fernanda Ferrero. Los cuatro primeros pertenecen a Compromiso para el Cambio y la restante a la fuerza que lidera Ricardo López Murphy. Todos comprendieron los argumentos del presidente de la AFA, quien se encuentra actualmente en Europa para participar en las galas por el centenario de la FIFA.
Mientras tanto, Peña, quien conduce la comisión de Turismo y Deporte de la Cámara y milita en Gesta, la fuerza política que creó el canciller Rafael Bielsa en la ciudad de Buenos Aires, la emprendía contra Don Julio. Describió con sarcasmo que era el “diputado 61”, cuestionó “la defensa de los intereses corporativos del negocio de la televisión” y, por último, fustigó a algunos diputados por “el temor reverencial” que le tienen a Grondona. Sea como fuere, el fútbol salió airoso de esta ofensiva inicial por la crisis energética, aunque el presidente de la AFA tuvo que extremar sus recursos para frenarla.
Dos hechos sintetizan el esfuerzo: el veterano dirigente llamó a México a José María Aguilar, el presidente de River, para consultarlo y apeló a los buenos oficios de un emisario, que es asesor del diputado porteño Roberto Vázquez (UCR) y hombre cercano a Rosario Central, para calibrar el humor de la Legislatura. De este modo, y también gracias a otro parlamentario que responde a Macri, el comedido Jorge Enríquez –quien se jactó en público de haber mediado ante Grondona y hasta mandó una carta de lectores al diario La Prensa para respaldarlo–, el bloque futbolero nacional neutralizó la solitaria embestida legislativa.
Además y, por si acaso, la AFA les recordó a sus clubes afiliados en su último boletín que cuando jueguen partidos nocturnos deberán utilizar grupos electrógenos. Una disposición reglamentaria que se instrumenta a medias, según sospechan quienes colaboraron con Peña en una investigación sobre el consumo de energía eléctrica en las canchas. Y es que argumentan cómo se puede disfrazar el consumo de la red nacional, combinándolo con el uso de generadores.
Las presiones que recibió el diputado que presentó el proyecto fueron varias y podrían sintetizarse en la expresión “no nos van a hacer una ley por esto...”, que se escuchó en la Legislatura porteña. Sin embargo, de nada sirvieron, ya que Peña y su equipo, donde trabaja el periodista y abogado César Francis, secretario del foro “Las entidades deportivas en manos de sus socios”, confían en la información que poseen. Y sus datos indican que el empleo de grupos electrógenos, en algunos casos, sólo alcanza a cubrir un 60 por ciento de la energía necesaria. “Son mentiras que no se usa la red”, aseveró Francis.
En la AFA niegan el uso de la corriente eléctrica de Edenor o Edesur y aseguran que la utilización de grupos electrógenos es un hecho normal en todos los espectáculos nocturnos. Incluso, una fuente de la asociación le confió a Página/12 que “en los partidos televisados de la B Metropolitana, el gasto del generador corre por cuenta de TyC o TyC Sports”. Este último es el canal que transmite los encuentros de esa categoría que se juegan los martes por la noche.
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