Por Sebastián Fest
Desde Hamburgo

Con la mente puesta en ganar dentro de 20 días su primer Grand Slam, Guillermo Coria voló ayer a París con dos ideas claras: mientras esté en Roland Garros no hablará con los dirigentes sobre la crisis en la Copa Davis, aunque ya sabe que quiere una capitanía doble, con Alberto Mancini y Martín Jaite como capitanes.
El equipo de Copa Davis argentino entró en crisis a fines del mes pasado al revelarse el contenido de una carta en la que los 14 mejores jugadores del país anunciaban que habían votado por Jaite y Mancini como reemplazantes de Gustavo Luza. Tras negar primero la existencia de la carta, la Asociación Argentina de Tenis (AAT) reaccionó convocando a una reunión con todos los jugadores en Roland Garros, que comienza el lunes.
“En Roland Garros va a ser muy difícil. Yo no voy a hablar con nadie allí. Quiero estar concentrado en lo mío. Después del torneo no tengo ningún problema en hablar sobre el tema. Ellos tienen que analizar bien las cosas, y cuando tengan algo concreto, juntarnos todos en Buenos Aires. Pero en Roland Garros no lo veo... Nadie quiere reunirse ahí.”
Mancini fue hasta enero el entrenador de Coria, que es dirigido ahora por Fabián Blengino. Coria ya se entusiasma con ver a Mancini en la silla de capitán. “Ojalá, ojalá. Y estaría muy bien lo de juntarlo con Jaite”, agregó, retomando una propuesta de Juan Chela. “Por lo que escuché, hay varios jugadores que estarían de acuerdo”, asegura Coria.
Mancini estuvo en Hamburgo, y habló como si su capitanía ya fuera un hecho, aunque Coria asegura que no es así: “Me dijo que nadie habló aún con él. Pero sería bueno, porque lo conozco muy bien, él me conoce. Sabría cómo manejarme. Yo sé cómo se maneja él, sería espectacular tenerlo en el banco”.
“Jaite y Mancini son los dos que salieron votados en la reunión de Montecarlo. Los dos son muy parecidos y tenemos todos muy buena relación con ellos”, explica Coria, que rechaza una capitanía de cuatro, tal como tuvo España en el 2000: “No, ya de cuatro es un quilombo... Pero dos está bien, porque en Copa Davis viene bien”.
Mientras asegura que la AAT sigue sin contactar a los jugadores, insiste en su “dolor” por la forma abrupta en que Luza dejó su puesto. “Le estuve mandando e-mails esta semana. Fue muy feo lo que pasó. No queríamos que se hiciera público, pero se filtró... Nadie quería hacerle daño a Gustavo.”
“La carta se hizo porque (el presidente de la AAT, Enrique) Morea dijo en la Davis que el capitán seguía siendo Luza, sin consultar a los jugadores, y eso molestó a todos. Cuando yo era el cuatro o cinco (de la Argentina) se eligió a (Alejandro) Gattiker y nadie me preguntó. Y luego lo mismo con Luza. Yo me pongo en el lugar de Acasuso, de Chela, de Gaudio y de todos los demás y lo entiendo, por eso estuve en la reunión para que el voto de cada jugador tuviera el mismo peso”, relata.
“Ahí se votó, y salieron Vilas, Clerc, Luza, de todo... Frana, varios. La carta no fue para que lo echaran a Luza. Fue para que la AAT sepa cuál es el capitán que los jugadores quieren. Si ellos hubieran dicho: ‘No, sigue Luza por esto, esto y esto’, se llegaba a un arreglo, y se acababa todo. Nosotros no tenemos el derecho de elegir un capitán o sacarlo, y ellos no tienen el derecho de elegir y sacarlo sin consultarnos. Creo que esto tiene que ser hablado. La decisión final es de ellos, eso sí.”
Coria reconoce que “fijar un plazo estuvo mal”, ya que fue malinterpretado: “Era para que la AAT contestara, a ver cuál era la idea de ellos. No para que antes de determinada fecha Luza no estuviera más”.