Después de su gran éxito en París, Gastón Gaudio regresó ayer al país y desnudó todas sus sensaciones por haber ganado el torneo más importante del mundo sobre polvo de ladrillo. “Gané Roland Garros, eso no me lo quita nadie, es demasiado fuerte, una sensación única que me permitirá disfrutar del tenis como nunca antes”, reflexionó el nuevo número diez del planeta. Además, el jugador de Temperley adelantó que sus próximos objetivos están centrados en la Copa Davis y en los Juegos Olímpicos de Atenas, que se desarrollarán en agosto próximo.
Gaudio destacó que cumplió su “sueño personal. Estoy agradecido a la vida, pero ahora me quedan dos objetivos por cumplir: ganar la Copa Davis y una medalla en los Juegos Olímpicos de Atenas”.
El primer campeón argentino de un Grand Slam después de 27 años, quien antes de esta conquista había ganado dos títulos en su carrera (Mallorca y el Conde de Godó de Barcelona, ambos en 2002), resaltó el excelente momento que atraviesa el tenis en el país: “El tenis argentino pasa por su mejor momento desde la época de Guillermo Vilas. Somos los mejores en polvo de ladrillo junto a España; de hecho, los dos rivales más difíciles que tuve en Roland Garros fueron argentinos”.
“Jugué –agregó Gaudio– durante dos semanas un tenis fantástico, sobre todo ante Hewitt y David (Nalbandian). En la final no estuve bien, pero bueno, las finales son para ganarlas y nada más.” El jugador se adjudicó en forma brillante el Abierto de Francia, un torneo que sólo había ganado Vilas en 1977, luego de vencer consecutivamente a Guillermo Cañas, al checo Jiri Novak, al sueco Thomas Enqvist, al ruso Igor Andreev, al australiano Leyton Hewitt, a Nalbandian y en la final a Guillermo Coria.
El tenista también se refirió ayer a su vencido en la final, el santafesino Coria, y recordó el incidente que protagonizaron hace un año en las semifinales del Masters Series de Hamburgo, cuando estuvieron muy cerca de tomarse a golpes de puño. “Esa vez Coria hizo algo que me pareció antideportivo y se lo hice saber: siendo un top-ten no necesita artimañas para lograr un triunfo. El domingo se me pasó por la cabeza que podía estar fingiendo nuevamente, pero no fue así, demostró que realmente estaba acalambrado y le costaba jugar”, añadió Gaudio. En aquella ocasión, Coria acusó calambres tras ganar el primer set y durante el segundo parcial que se adjudicó Gaudio, pero en el tercero y definitivo dejó atrás sus molestias físicas y ganó por 6-0 para lograr el pase a la final, que luego le ganaría a Agustín Calleri.
Gaudio destacó que su victoria tuvo más valor por la calidad del rival que tenía del otro lado de la red: “Coria era el gran favorito, con un record impresionante en polvo. Por momentos creía que vivía parte de una película y recién pensé que podía vencerlo cuando quedó 15-40 con su saque y tuve dos match points a mi favor”. Y mencionó las palabras que le dedicó a su rival luego de vencerlo en la final: “Le dije que se quedara tranquilo, que no se sienta mal, porque tiene tenis para ganar Roland Garros el año que viene”.
Durante esta semana, Gaudio comenzará su preparación para el Abierto de Wimbledon, el tercer Grand Slam del año, que comenzará el próximo 21 de junio, en Londres, y se jugará sobre césped.