Paola Suárez, quien con la española Virginia Ruano-Pascual lograron el pase a las semifinales de dobles femeninos, dijo que están más motivadas que nunca para conseguir de nuevo el título del Abierto de Estados Unidos. “Hemos vuelto a jugar un gran partido, estuvimos seguras en la cancha y sabíamos cómo hacer las cosas frente a Husarova y Martínez, a la que conocemos muy bien”, declaró Suárez. “Volvimos a complementar a la perfección.”
Suárez, de 28 años, quien junto con Ruano-Pascual son las cabezas de serie número uno, dijo que su objetivo no era otro que revalidar por tercer año consecutivo el título de campeonas.
“Es nuestra meta. Estamos en buena forma y queremos mantener la racha de triunfos hasta que nos dure”, destacó Suárez después de haber ganado 6-3, 6-3 el partido de cuartos ante la eslovaca Janette Husarova y la española Conchita Martínez. “Fue más complicado de lo que pareció. Tuvimos que ser agresivas y pacientes”, se reivindicó Suárez.
En cuanto a la próxima pareja rival, que será la que integran la rusa Elena Dementieva y la japonesa Ai Sugiyama, decimoquintas cabezas de serie (que ganaron 4-6, 6-2, 6-4 a la sudafricana Liezel Huber y la tailandesa Tamarine Tanasugarn), Suárez dijo que las conocían, pero que igual trabajarían todos los detalles para llegar al partido con garantías.
“Las conocemos bien”, sentenció Suárez. El desgaste de Dementieva, que hoy tiene que disputar antes también una semifinal de singles ante la estadounidense Jennifer Capriati, puede ser un factor que favorezca a la pareja argentino-española. “Puede ser, aunque yo la vi moviéndose bien hoy en el dobles”, aseguró Suárez, que tuvo tiempo de observar el final del choque de sus rivales.
Será la cuarta semifinal de un Grand Slam que disputan Suárez y Ruano-Pascual este año: fueron campeonas en Australia y Roland Garros y sólo cayeron en Wimbledon.
“Mañana (por hoy) estaremos listas para el nuevo reto de lograr el pase a la final y estoy convencida de que haremos nuestro mejor esfuerzo”, comentó Ruano-Pascual. “Lo más importante es que nos compenetramos cada vez mejor y no damos opción a las rivales a que hagan su juego.”
Al valorar el problema del viento que soplaba en la cancha donde jugaron el partido, Suárez dijo que era un factor que les favorecía porque se desenvolvían mejor con su juego.
“Para nuestro estilo nos favorece el viento, porque podemos pegarle más fuerte a la pelota y lo mismo cuando estamos sobre la red con las voleas”, explicó Suárez. “Sabemos cómo ganar y vamos a seguir por el mismo camino.”
El partido fue especial para Ruano-Pascual, porque al otro lado de la red estaba Conchita Martínez, que hace escasas semanas fue su pareja en la conquista de la medalla de plata en los Juegos Olímpicos. “Al principio se hizo raro, pero luego conseguí verla como una más.” Suárez alcanzó la medalla de bronce en los Juegos junto a Patricia Tarabini.
Suárez y Ruano-Pascual dijeron que una de las claves de su tenis es que siempre tienen paciencia y saben cómo disputar los puntos decisivos y eso es lo que esperan que siga sucediendo hasta el final del torneo.
La otra semifinal del dobles femenino la animarán las rusas Svetlana Kutnetsova y Elena Likhovtseva (segundas favoritas) ante la austríaca Bárbara Schett y la suiza Patty Schnyder (preclasificadas en el 12º lugar).
No todo fue alegría para el tenis nacional: a los 54 años, Guillermo Vilas fue eliminado ayer del torneo de dobles de más de 45 años, al caer 6-3, 6-1 junto a Patrick McNamara frente a los norteamericanos Johan Kriek y Kevin Curren.