La interna política de Independiente parece recalentarse día a día. A las impugnaciones que en los próximos días formularán las tres agrupaciones más importantes del club sobre el informe de memoria y balance que fue aprobado el pasado 28 de diciembre, se sumó un dato que pondría en peligro la candidatura de Julio Comparada para las elecciones adelantadas que se celebrarán en abril. Es que, si se comprueba que el empresario mantiene vínculos comerciales con la institución, no podrá presentarse a los comicios.
El artículo 41 del Estatuto General de la entidad de Avellaneda indica que si un socio mantiene una relación empresarial con el club no puede desempeñar funciones por el término de seis años. Es por eso que miembros de las agrupaciones políticas consultadas por Página/12 adelantaron que solicitarán la revisión de todos los vínculos contractuales firmados por los jugadores que Comparada trajo al club, con el propósito de constatar si su nombre aparece como gestor o intermediario en esas operaciones. Si esto se comprueba, el actual hombre fuerte de Independiente no podría ser candidato a presidente ni a ningún otro cargo.
Sin embargo, por el momento, estos contratos no pudieron ser revisados, dada la negativa que existe por parte del oficialismo a suministrar esta información, aunque las agrupaciones lo solicitaron en reiteradas ocasiones antes de que la Asamblea de Representantes se reuniera con la intención de aprobar el balance. Fuentes consultadas por este diario indicaron que ninguno de estos contratos están registrados en la institución y en algunos casos fueron excluidos de la última memoria y balance por pedido del empresario. Claro que representar jugadores y cumplir funciones dentro de la institución parece ser una práctica consentida por las actuales autoridades de Independiente, ya que el socio Adrián Bianco, miembro número 28 en la Asamblea de Representantes, figura como representante del jugador brasileño Sergio Manoel, algo que está prohibido por los estatutos de Independiente.
El 28 de diciembre pasado, el mismo día en el cual se anunciaba la llegada de Menotti como entrenador, la Asamblea de Representantes aprobó, en una turbulenta sesión, el informe de Memoria y Balance anual, fraguando el resultado de la votación que tuvo lugar en el recinto, según denunciaron los responsables políticos de las agrupaciones Lista Roja, Identidad Roja y Gente de Independiente. El oficialismo presentó una moción para aprobar un balance en el cual figuraba un pasivo de 43 millones de dólares y donde existían gastos no justificados por casi 7 millones de pesos. Entre estas erogaciones, figura el retiro de más de 700 mil pesos en concepto de vales de caja que, de acuerdo con lo que consignaron los miembros de Comisión Directiva en la sesión, se utilizaron para pagarle el contrato a Federico Insúa. Un argumento que fue cuestionado por los integrantes de la Comisión Revisora de Cuentas de la entidad mientras se desarrollaba la Asamblea.
Al momento de producirse la votación, los representantes de la oposición lograron rechazar el Balance y la remoción de la Comisión Directiva por 34 votos contra 31. Pero de forma inesperada, el presidente del club, Andrés Ducatenzeiler, que conducía la sesión, anunció que la moción del oficialismo había caducado y que se retiraba, ante la indignación de todos los presentes. Ducatenzeiler dejó su lugar a su vice, Fernando Sciacaluga, quien tras negar una nueva votación nominal, dio por aprobada la moción del oficialismo. Allí se desataron todo tipo de reacciones y agresiones. Los socios que manifestaban su indignación fueron amenazados y golpeados por los integrantes de la barra brava que se encontraban en el lugar con el objetivo de ejercer presión.
Aunque luego se pasó a una sesión extraordinaria, en la cual se aprobó de forma unánime el adelantamiento de las elecciones presidenciales para el 28 de abril, los socios presentes decidieron impugnar el resultado de la primera votación con una denuncia a la Dirección de Personería Jurídica de la Provincia de Buenos Aires, certificada por todos los socios que votaron contra la moción del oficialismo. Además impulsarían una denuncia penalpor malversación contra los miembros de la actual Comisión Directiva y una acción civil para que los dirigentes reintegren los fondos que retiraron.
Mientras tanto, Julio Comparada, con su silencio, parece avalar la aprobación de un balance polémico mientras aguarda presentarse como candidato a las próximas elecciones. Resta saber si los estatutos de Independiente se lo permiten.

Informe: Leonardo Castillo.