Clasificado al Mundial de Holanda, pero sin posibilidades de luchar por el título, el seleccionado juvenil que dirige Hugo Tocalli cerrará hoy su participación en el Torneo Sudamericano Sub-20 de Colombia con un objetivo doble: ganar el clásico ante Brasil y terminar invicto en el certamen. Un triunfo le permitirá al equipo argentino alcanzar el segundo puesto de la clasificación, lo cual facilitaría también la consagración del conjunto local, que en el primer turno se enfrentará a Venezuela. Igualmente, si los colombianos ganan su compromiso, Brasil arrancará su partido ante Argentina sin chances de ser campeón.
El hecho de sacarse de encima el peso de obtener una de las cuatro plazas para el Mundial hizo que los jugadores argentinos se mostraran mucho más distendidos en los últimos entrenamientos, en los cuales coincidieron en que tienen muchas ganas de ganarle a Brasil en la última fecha. “Tenemos muchas ganas de vencer a Brasil por todo lo que representa un partido de estas características. Ellos son nuestros principales rivales y no queremos dejar pasar la oportunidad de vencerlos para despedirnos del campeonato con una alegría”, señaló el capitán del equipo argentino, Pablo Zabaleta. En ese sentido, el arquero Oscar Ustari, uno de los jugadores más regulares del certamen, estimó que “sería un lindo cierre” imponerse a Brasil en la despedida de Tocalli como entrenador de los planteles juveniles de la AFA. “Queremos que Hugo deje su cargo con una alegría, y qué mejor que con un triunfo ante Brasil”, remarcó Ustari.
Con respecto a la formación, Tocalli aún no definió el equipo, aunque éste no variará demasiado del que igualó en un tanto con Colombia el miércoles pasado. La única variante será el ingreso del volante de San Lorenzo, Pablo Barrientos, quien reemplazará a José Sosa. Por su parte, el entrenador brasileño René Weber anticipó dos cambios en la alineación titular que enfrentará a Argentina. El mediocampista Edcarlos y el lateral derecho Rafinha, volverán al equipo tras purgar una fecha de suspensión como consecuencia de haber acumulado tarjetas amarillas.
Al cierre de esta edición, Uruguay y Chile definían la última plaza que otorga el Torneo para el Mundial de la categoría, que ya tiene como clasificados a Colombia, Brasil y Argentina. Con un empate, los trasandinos se aseguraban su presencia en Holanda 2005.