Luego de su despido de la dirección técnica de Corinthians, Daniel Passarella no se quedó con los brazos cruzados y ya comenzó una batalla legal contra el club paulista y el grupo inversor MSI, que gerencia a la entidad, para recibir 1,2 millón de dólares de indemnización por haber sido cesanteado de su cargo tras la caída que su ex equipo sufrió el domingo pasado 5-1 en el clásico ante San Pablo.
De acuerdo con lo que informó la cadena Record, Passarella contrató a los abogados Daniel Crespo, Iran Aires Monteiro y Mario Vaisman para intentar cobrar el dinero prometido en el contrato en caso de ser removido del cargo. Pero desde el grupo que gerencia al club están buscando una estrategia para no tener que pagar esa suma. Paulo Angioni, dirigente de MSI, el fondo de inversión inglés que administra a Corinthians, dijo que “hay un intento de MSI y de Passarella para que él permanezca en otro cargo, ya que en el contrato dice que él puede figurar como consultor”. Por su parte, el iraní Kia Joorabchian, titular de MSI, quiere que la multa a Passarella la pague la dirigencia de Corinthians, que fue la que presionó para que el argentino sea despedido, según lo que publicó ayer el diario Estado de Sao Paulo.