Con los ojos brillosos se arrimó al palco y, tímidamente, tomó los trofeos que lo nombraban mejor jugador y, además, goleador del Mundial Sub-20 de Holanda 2005. Al igual que en todo el certamen, Lionel Messi fue la estrella, el jugador distinto que le permitió a la Selección Argentina alzar su quinto campeonato mundial de la categoría. En el partido decisivo, con dos certeros remates desde el punto penal, el jugador de Barcelona contribuyó para que Argentina derrotara 2-1 a Nigeria, que pecó por su falta de experiencia en instancias finales.
La alegría del final de los chicos argentinos fue merecida, ya que el conjunto nigeriano salió decidido a convertirse en el primer país africano en consagrarse campeón de este torneo. Así, desde el comienzo, el conjunto dirigido por Francisco Ferraro sufrió la presión asfixiante que impuso Nigeria en el mediocampo, apoyada, principalmente, por el buen criterio de Jon Obi Mikel y Promise Issac para armar juego.
Un cabezazo de Adeleye y un buen remate de Owoeri, en los primeros veinte minutos, pusieron en riesgo el arco de Ustari. Sin embargo, a partir de allí, Argentina mejoró su producción y lentamente fue saliendo del acecho, a partir de la buena producción del delantero Oberman.
Hasta ese entonces, el rendimiento de Messi era discreto, ya que era muy buena la labor de la defensa rival. Pero a cinco minutos del final de la primera parte, con espacio para el contragolpe, Messi trasladó en velocidad la pelota hacia el área nigeriana, hasta que Adeleye le cometió una ingenua infracción. El propio Messi convirtió el penal, con un toque suave a la derecha de Vanzekin, que eligió el otro palo.
A los ocho minutos del complemento, Nigeria empató el partido gracias a una espléndida palomita de Owoeri. El gol envalentonó aún más al conjunto africano, que llegaba al área argentina con varios jugadores, pero que dejaba muchos espacios en el fondo.
Ferraro hizo ingresar a Agüero por un exhausto Oberman y, a quince minutos del final, el juvenil delantero de Independiente –tras una buena jugada– fue derribado dentro del área por Taiwo. Entonces apareció nuevamente Messi que, a diferencia del primer penal, eligió el palo izquierdo de Vanzekin, quien resultó nuevamente engañado. Sobre el final, Argentina pudo aumentar la diferencia, pero ya era suficiente. La función del Messi había terminado, y el final feliz argentino fue mejor al imaginado.

Argentina 2
Ustari; Barroso, Garay, Paletta, Fórmica; Zabaleta, Torres, Gago, Archubi; Messi, Oberman.
DT: Francisco Ferraro.

Nigeria 1
Vanzekin; Adefemi, Adeleye, James, Taiwo; Abwo, Kaita, Mikel, Owoeri; Isaac, Ogbuke.
DT: Samson Siasia.

Estadio: De Galgenwaard, Utretcht.

Arbitro: Terje Hauge (NOR).

Goles: 40m Messi (A), de penal; 53m Ogbuke (N); 75m Messi (A), de penal.

Cambios: 57m Agüero por Oberman (A); 61m Armenteros por Archubi (A); 72m Biglia por Gago (A); 85m Okoronkwo por Abwo (N).