Guillermo Coria desaprovechó una oportunidad de oro para lograr su décimo título en el circuito de la ATP al caer 6-4, 5-7, 6-3 en las semifinales del certamen de Sopot, Polonia, ante el alemán Florian Mayer, número 95 en el ranking mundial. En un torneo en el que no quedaban rivales a priori complicados, el argentino era el gran favorito, ya que los otros tres semifinalistas estaban ubicados por detrás del puesto 60. Sin embargo, cansado y molesto por el clima, Coria no pudo imponer su juego y de esa forma se quedó con las ganas de repetir el título que logró en este certamen en 2003.
Coria, que venía de adjudicarse la semana pasada el abierto de Umag, tras quince meses sin festejos, cumplió una actuación irregular y se quedó sin la posibilidad de repetir una final. El argentino, visiblemente molesto por el juego del rival y las condiciones climáticas (frío y lluvia), habló mucho y golpeó el suelo con la raqueta, lo que le valió una advertencia del árbitro. Ahora, en el historial entre ambos, el alemán tomó ventaja de 2-1, ya que se había impuesto en la primera rueda en Wimbledon 2004, mientras que Coria había vencido en la Copa del Mundo de Düsseldorf, en mayo de este año.
En el primer set, el juego fue equilibrado hasta el décimo game, cuando el alemán consiguió quebrar el servicio del argentino y se quedó con el parcial por 6-4. El cambio de ritmo que aplicó Mayer con los drop shots sorprendió al santafesino, que nunca pudo resolver con acierto esa circunstancia. En el segundo set, el Mago llegó a estar abajo 4-2, pero se recuperó, igualó en 4 y luego, con su mejor tenis, cristalizó la remontada por 7-5. En el tercero y decisivo, Mayer quebró en el tercer y en el sexto juego para tomar una amplia ventaja de 5-2, que resultó definitoria para consumar la victoria y el pasaje a la final. En esa instancia se enfrentará con el juvenil francés Gael Monfils, que en la otra semifinal se impuso 3-6, 7-5, 6-4 al italiano Potito Starace.