El abogado del policía imputado de dispararle al futbolista Carlos Azcurra afirmó ayer que su defendido “estaba cumpliendo órdenes superiores de reprimir y efectuar disparos intimidatorios” cuando el arma se le disparó “por accidente”, mientras Futbolistas Argentinos Agremiados declaró un estado de alerta, lo que significa que la actividad podría sufrir un receso si se repite un caso de violencia en las próximas semanas. Azcurra recuperó el conocimiento y manifestó brevemente su preocupación por el rendimiento de su equipo, San Martín de Mendoza, que perdía 3-0 cuando el partido fue suspendido, pero el médico del club, Claudio Bertona, insistió en que el futuro del jugador es “incierto”.
Eduardo Tapia, que defiende al cabo Marcial Maldonado, el autor del disparo a quemarropa sobre Azcurra que el entrenador de San Martín de Mendoza calificó como “una ejecución”, afirmó que los efectivos policiales “estaban cumpliendo órdenes superiores de reprimir y efectuar disparos intimidatorios y en el forcejeo se dispara accidentalmente el arma”. Ese forcejeo y el posterior disparo fue lo que el jefe del operativo de seguridad del partido, Jorge Pereira, calificó el domingo como “agresión mutua”. Pereira fue pasado el lunes a disponibilidad.
“Ante la orden de represión dada por la policía de Mendoza, jugadores de San Martín forcejearon con ellos. Esas armas se disparan desde la cintura. Por eso reitero que el disparo fue accidental”, afirmó el abogado de Maldonado, quien aseguró que su cliente está “afligido” por lo que sucedió. El cabo está acusado de “homicidio agravado en grado de tentativa”.
Luego de que el gobernador Julio Cobos criticara el domingo el accionar de la policía mendocina –clasificada como la quinta más represora del país por la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), después de la santafesina, la Bonaerense, la Federal y la cordobesa–, el ministro de Seguridad y Justicia de la provincia, Osvaldo Tello, opinó ayer que la fuerza “ha mejorado. El policía no tenía antecedentes, por eso cumplía la función”, afirmó.
Azcurra “evoluciona favorablemente y comenzará con ejercicios respiratorios”, aunque su diagnóstico “es reservado”. “Está compensado –informó el médico Bertona–. Pero por lo menos tiene para cinco a siete días más en terapia intensiva. El problema son las complicaciones que puedan surgir. Su futuro todavía es incierto.”