¿Qué tienen en común César Luis Menotti y Juan Sebastián Verón? Por empezar, un mismo mundo, el del fútbol..., que los dos pasaron por la selección, el fierro con que uno le pegaba a la pelota y el otro le sigue pegando, y además cierta incontinencia verbal. Sobre todo si se trata de cuestionar a José Pekerman. Esa es la más reciente de las coincidencias.
El técnico campeón mundial del ’78 sigue en la misma línea argumental que hace casi un año. Cuando el actual entrenador del seleccionado sucedió a Marcelo Bielsa, se preguntó en una entrevista que le realizó el diario español El País: “Es que no sé qué es Pekerman. Nunca dirigió nada...”. Después aclaró que no lo decía peyorativamente, aunque oscureció antes. Y ahora acaba de permitirse una metáfora muy obvia para describir qué espera de la selección: “Un equipo de fútbol es como una orquesta, cuanto más tiempo de ensayo tenga el grupo, mejor. Ya se probó mucho, ahora falta poco para el Mundial y hay que empezar a definir”, comentó por TyC Sports.
En septiembre del 2004, Menotti se había jactado hasta de su propia ignorancia para descalificar al colega, vaya a saber por qué razón. “No lo conozco bajo presión, no conozco su personalidad, no conozco su idea de juego en la búsqueda de la eficacia. Si no se tiene una gran personalidad, no se pueden transmitir esas ideas a jugadores profesionales.” Hoy, cuando ya lo debería conocer, afirma que “hay una incertidumbre, nadie se siente titular y esto hace que todos opinen...”. ¿Y Menotti? ¿No opina?
El telón rápido abre paso a la Brujita Verón, un candidato autoproclamado a integrar el plantel desde que se convirtió en el jugador que más desilusionó durante el Mundial 2002. Sabido es que no está en los planes de Pekerman y cualquier colectivo que pasa le viene bien para subirse al seleccionado. Al margen de una lesión, tampoco lo convocaba Bielsa desde el 19 de noviembre de 2003, cuando jugó su último partido con la celeste y blanca ante Colombia (1-1 en Barranquilla en las Eliminatorias).
Verón se permitió criticar desde afuera la decisión del técnico de sacarle la cinta de capitán a Roberto Ayala para entregársela a Juan Pablo Sorin, con quien estaría distanciado. ¿Lo habrá hecho para reivindicar al defensor del Valencia o para tirarle un pelotazo por elevación al nuevo referente de la selección?