DEPORTES
› SUECIA, EL PROXIMO RIVAL DE LA ARGENTINA, ES LA PREOCUPACION DEL ENTRENADOR
Bielsa sueña con las películas de Bergman
Inglaterra ya pasó y ahora la obsesión es Suecia. Puesto a ver videos del próximo rival, el entrenador no se priva ni de las cintas del cineasta. No habrá cambios sustanciales en la formación del equipo para el partido del miércoles a las 3.30. ¿Verón jugará de 5 y Aimar será la manija?
› Por Ariel Greco
Inglaterra ya fue, ahora hay que pensar en Suecia. Ese es el razonamiento que impera en el alma de la Selección Argentina tras la derrota, que complicó las chances de avanzar a los octavos de final del Mundial. “Hay que ir distanciándose de la tristeza y enfocar el próximo compromiso”, señaló Marcelo Bielsa apenas terminado el partido ante los ingleses. El mensaje se repitió también desde los jugadores. Y el próximo compromiso significa Suecia.
Para avanzar a la siguiente ronda sin depender de terceros, Argentina debe ganarles a los suecos, el miércoles a las 3.30, sin importar el marcador. Con ese resultado se garantiza el segundo lugar del grupo, y jugaría los octavos de final el sábado 15 a las 8.30 ante el ganador del Grupo A (¿Dinamarca? ¿Senegal?), aunque con un empate o una derrota de Inglaterra ante la ya eliminada Nigeria ganaría la zona, y jugaría el domingo 16, a las 3.30, ante el segundo del Grupo A. Con una igualdad ante los suecos, las chances se reducen a un milagro: esperar que los ingleses pierdan por dos goles. La última posibilidad, más remota todavía, es que el equipo de Sven-Goran Eriksson caiga por un tanto, pero que en su empate Argentina consiga dos goles más que los ingleses en su partido.
La caída pegó duro en el plantel argentino. Por eso, la primera idea de Bielsa es tratar de olvidar la derrota lo más rápido posible y ponerse a pensar en el encuentro del miércoles. “La perspectiva inmediata es un partido por la clasificación, que nos va a obligar a enfocar ese compromiso de inmediato e ir distanciándonos de la tristeza que genera una derrota”, afirmó Bielsa.
En la misma tónica se mostró Hernán Crespo: “Nos faltó un poco de suerte para sacar un mejor resultado, pero ahora debemos pensar en Suecia. Depende solamente de nosotros, desperdiciamos una de las dos chances que teníamos para clasificar”, comentó el delantero de la Lazio. Tampoco fue muy diferente el discurso de Gabriel Batistuta. “Por más que ahora digamos que merecimos el empate, nosotros estamos obligados a ganarle a Suecia. Tenemos que mantener la confianza porque no hay nada perdido”, dijo Batistuta.
Si bien es prematuro especular con la formación que presentará Marcelo Bielsa ante los suecos, es seguro que su esquema no cambiará. Si la situación límite –perder con Inglaterra– no lo llevó a modificar la estructura, es casi imposible que la variante táctica se produzca el miércoles en Miyagi. Está más claro que nunca que la alternativa de que Batistuta y Crespo no va a producirse bajo ninguna circunstancia.
Lo que sí parece probable es alguna modificación de nombres. Las bajas actuaciones individuales de algunas piezas clave –Verón, Simeone– puede llevar a cambiar a algunos futbolistas que a priori eran intocables. Resulta muy llamativo que en los dos partidos Verón haya sido reemplazado, incluso ayer durante el entretiempo. “El cambio no se debió a cuestiones físicas sino a exigencias del partido”, remarcó Bielsa sobre el ingreso de Pablo Aimar por el conductor natural del equipo. “En un Mundial hay dificultades para todos y no es sencillo imponer el juego creativo”, dijo el entrenador para defender al capitán. Lo curioso es que antes del torneo Verón era un jugador indispensable y ahora, a partir de sus bajas actuaciones, se transformó en la primera opción de cambio.
Por eso, a esta altura Bielsa ya debe estar pensando en darle continuidad a Verón u otorgarle la confianza a Aimar, que tuvo una correcta labor en la segunda etapa. La otra alternativa, que ya manejó en los amistosos previos al campeonato, es que el ingreso del jugador del Valencia se produzca por Simeone, que tampoco tuvo un rendimiento acorde a lo que se espera. Ese cambio, una propuesta mucho más audaz, arrastraría a Verón a la posición de volante central, lo que quitaría capacidad de marca, pero agregaría opciones para manejar la pelota. Lo concreto es que Argentina deberá jugarse su continuidad en el Mundial ante un adversario, Suecia, que en sus dos presentaciones demostró una admirablecapacidad de lucha para superar situaciones adversas. Tanto ante Inglaterra como ante Nigeria, el conjunto nórdico arrancó perdiendo, pero luego se sobrepuso y revirtió los resultados.