Portugal recompuso la floja imagen que había dejado en el debut frente a Estados Unidos –cayó 2-3– y goleó bajo la lluvia a Polonia por 4-0, en partido por el Grupo D. Los de Antonio Oliveira dejaron en el olvido la caída inicial y brindaron un festival de goles y fútbol, con tres tantos de Pauleta, delantero del Bordeaux francés, y uno de Rui Costa, ingresado en la segunda parte.
Desde el arranque, Portugal evidenció una actitud y disposición distinta de la exhibida el miércoles: Figo bien tirado a la derecha, Sergio Conceiçao parado en el medio, aportando quite y distribución, y Pauleta rotando, peligrosísimo. Así llegaron los goles ante un equipo polaco que se prestó al ida y vuelta y cayó sin especular. Incluso el árbitro escocés Hugh Dallas anuló un gol de Kryszalowicz, a raíz de una supuesta infracción de Olisadebe al siempre dubitativo Vitor Baía.
Portugal ganó, recompuso su imagen y vuelve a estar en carrera hacia octavos. Polonia perdió, reiteró las defecciones exhibidas ante Corea (0-2) y deberá emprender el adiós. Un Mundial no da muchas posibilidades de equivocaciones. Portugal sólo depende de sí: debe ganarle al local, Corea, y zafa. Un empate puede llegar a alcanzarle también.