La sonrisa de Rooney

El talento inglés Wayne Rooney, cuya participación en el Mundial está todavía en duda, regresó ayer de Inglaterra a Alemania. El delantero, que viajó a su país para realizarse estudios para determinar si podrá jugar o no el torneo, salió del hospital BUPA de Manchester sin hacer declaraciones, pero con una sonrisa en los labios, según informaron testigos presenciales.

Mexicaneada

Vistiendo los colores de México por primera vez en un Mundial, el delantero argentino Guillermo Franco se siente tan identificado que no sólo canta el himno de ese país sino que, además, dice sentirse ciento por ciento mexicano. “Yo soy tan mexicano que canto el himno con un orgullo que nadie se imagina”, manifestó el correntino, quien agregó que México le ha dado “todo como futbolista”, mexicano por adopción desde enero de 2005.

Enemistades

La selección italiana perdió una ocasión inmejorable para ganarse al público alemán al negarse a saludar al medio millar de aficionados que esperaban su llegada en Duisburgo. Cuando la policía informó que los italianos no saldrían al balcón, los mismos aficionados, exasperados, pasaron a los silbidos e insultos.

Payasadas

El entrenador de la selección portuguesa, el brasileño Luiz Felipe Scolari, se mostró ayer “irritado” por la inercia y la pasividad de sus jugadores. Scolari calificó el entrenamiento de ayer de sus dirigidos en la ciudad de Marienfeld de “payasada” y les recordó a los jugadores que el Mundial “no es ningún paseo”.

Acusa Zico

El seleccionador de Japón, el brasileño Zico, acusó ayer al volante alemán Bastian Schweinsteiger de haberle cometido una “terrible falta” a Akira Kaji, lesionado desde el partido amistoso que ambos equipos disputaron el 30 de mayo (2-2). “Schweinsteiger debería haber sido expulsado”, disparó Zico. A la queja se sumó el capitán japonés Tsuneyasu Miyamoto, quien denunció el comportamiento de los alemanes como “antideportivo”.

Bora, ausente

Después de cinco participaciones consecutivas en los últimos mundiales, el entrenador serbio Velibor “Bora” Milutinovic no estará presente en ninguno de los bancos del Mundial alemán. “Extraño no estar, pero estoy feliz de haber estado en cinco. Así es la vida. No descarto, sin embargo, volver a otro Mundial”, señaló Bora, quien dirigió a México en 1986, a Costa Rica en 1990, a Estados Unidos en 1994, a Nigeria en 1998 y a China en 2002. “Si hablamos de sorpresas, tal vez la dé algún país africano, como Costa de Marfil”, tiró.

Vigilar y castigar

El director de arbitraje de la FIFA, el ex colegiado español José María García Aranda, aseguró que los árbitros vigilarán con celo los comportamientos antideportivos. “Las reglas no han cambiado, pero hemos fijado algunos objetivos para ayudar a los árbitros a centrarse en el tipo de comportamiento que representa el problema más grande en términos de deportividad y juego limpio”, comentó García Aranda.

650

Millones de euros en publicidad, una cifra diez veces mayor a la de Italia ’90, es lo que invirtieron en el Mundial que comenzará mañana unas quince empresas multinacionales, que encabezan Adidas y Coca-Cola. Además, la FIFA recaudará 910 millones de euros por la venta de derechos televisivos, diez veces más de lo que dejó ese rubro en Francia ’98 y poco menos que los valores de los Juegos Olímpicos 2004.