¿Para cuándo el fútbol? Esta dolorosa cuestión está de nuevo en el centro de los debates en España, después de la consagración histórica del equipo nacional en el Mundial de básquetbol ante Grecia y ante el gran momento que vive el deporte español, con figuras como Fernando Alonso, campeón mundial de Fórmula 1; Rafael Nadal, número 2 del ranking mundial de tenis; Dani Pedrosa, bicampeón mundial de motociclismo; o la selección de hándbol, campeona mundial. En cambio, la selección española no gana nada importante desde la Eurocopa de 1964, hace más de 40 años...

El diario deportivo As dedicó ayer no menos de cuatro páginas a este tema, que hace rabiar al país desde décadas: ¿por qué el fútbol, en España, nunca llega a ganar grandes títulos, como lo volvió a demostrar la selección, eliminada por Francia en octavos de final del último Mundial en Alemania? La respuesta la hacen simple: “Nuestros futbolistas no son tan buenos” como ellos imaginan, contrariamente a los basquetbolistas, que no sólo están dotados, pero también trabajan duro y aprendieron a ganar en equipo, opinó el medio. La mayoría de los especialistas españoles no comparte, sin embargo, esta opinión iconoclasta, atribuyendo a otras múltiples causas –demasiados extranjeros en los clubes, falta de organización– los fracasos persistentes del equipo nacional.

“Hay muchos jugadores extranjeros” en la Liga, reafirmó, como muchos otros, el ex presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Juan Antonio Samaranch. Es cierto que los Ronaldo, Ronaldinho, Robinho, Deco, Eto’o, Van Nistelrooy, Diarra, Messi, Thuram y Cannavaro son las estrellas de grandes clubes campeones de Europa como el Barcelona o el Real Madrid. Pero la falta de organización y de maestros a nivel nacional se denuncia también a menudo para explicar las quiebras de la selección, que nunca ha superado el cruce de los cuartos de final en la historia moderna de la Copa del Mundo.

En España hay “muy pocos entrenadores capaces de enseñar, crear un verdadero estilo de juego”, permitiendo al fútbol español “luchar de igual a igual con el resto del mundo”, opinó Dani Ballart, ex campeón del mundo español de waterpolo. El presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, destacó los méritos de la selección de básquetbol. “Son jugadores que debutaban en un Mundial y que se comían a las grandes figuras porque había ambición de optimismo y de triunfo, y de que pase lo que pase iban a ganar”, afirmó.

La presión ejercida sobre los jugadores españoles desde su adolescencia también se cuestiona. “Transformamos en fenómenos a jugadores normales. Uno es el nuevo Van Basten, el otro es mejor que Maradona”, añade Ballart. Y los clubes, que pagan elevados salarios, a menudo se juzgan prioritarios. “El espíritu de equipo falta en el fútbol. A veces el club está antes que la selección”, reconocía el nuevo presidente del Real Madrid, Ramón Calderón.