El día después de Estudiantes campeón no tuvo respiro. A la mañana, tras los festejos en el Estadio Unico de La Plata que duraron hasta las 2, el plantel se reunió en la sede del club a las 10 y al mediodía concurrió a la Catedral de la capital bonaerense a llevar una ofrenda floral. La cantidad de hinchas presentes desbordó el esquema de seguridad y, entonces, los dirigentes optaron por suspender las visitas al intendente Julio Alak y al gobernador Felipe Solá. A la noche participaron de la fiesta oficial del club.