Tigre superó ayer como local a Chicago y mantiene vivas sus aspiraciones de lograr el ascenso a Primera, que quedará definido el próximo lunes, cuando ambos conjuntos se vuelvan a cruzar en la revancha que se disputará en Mataderos. El tanto de la victoria del equipo del ex Boca Diego Cagna lo marcó Leandro Lázzaro, un ex Chicago, con una chilena que se clavó en el ángulo y no tuvo respuesta del experimentado Carlos Fernando Navarro Montoya.

Los locales salieron bien en el arranque y presionaron sin descanso la salida del rival, apoyados en las buenas tareas de Lucas Wilchez y de Lázzaro, quien no tardó en arrimar peligro, con un remate por arriba del travesaño y otra jugada calcada, unos minutos más tarde.

Los de Carlos Ramacciotti, plantados para jugar de contra, apenas inquietaban con algunas subidas de Omar Zarif o con centros imprecisos a un solitario Filomeno, que no tenía una buena tarde.

Los hinchas de Tigre, que habían colmado el estadio de Victoria, pudieron gritar recién a los 31 minutos, con el golazo de Lázzaro.

Recién cuando se encontró abajo en el marcador, Chicago trató de buscar compensación. Y tuvo chances para empatar con remates de Damonte y Zarif, cuando el partido se iba al descanso.

Al regreso, Tigre bajó un poco su rendimiento y eso posibilitó que Chicago inflara un poco el pecho y saliera con más decisión a buscar el partido. Pero aunque el partido se jugaba en campo de Tigre, las chances de gol de Chicago no eran claras, incluso después de los ingresos de Zermattén y Campodónico. Pero Tigre defendía con firmeza la pequeña diferencia conseguida, ya con la cabeza puesta en el desquite.