Casi tres años después de abandonar a la Selección Argentina argumentando “falta de energía” para continuar conduciendo al plantel que, luego de la frustración del Mundial Corea-Japón 2002, consiguió el oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, el entrenador Marcelo Bielsa decidió volver y aceptó la propuesta de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile (ANFP) para dirigir la selección de ese país durante las eliminatorias mundialistas y, en caso de clasificar, hasta la finalización del Mundial de Sudáfrica 2010. El debut oficial tendrá un gustito especial, ya que será nada menos que contra Argentina y en Buenos Aires.

“Aceptó nuestra propuesta y está dispuesto a trabajar por el fútbol de Chile. Tenemos una satisfacción muy grande, porque se trata de una persona muy valorizada en el fútbol mundial. Nos llena de mucha alegría por su decisión”, afirmó al dar la noticia Harold MayneNicholls, presidente de la ANFP. “Bielsa es un técnico de un gran currículum, de gran experiencia y es un apasionado del fútbol. Por lo mismo, no hay posibilidad de un cambio (a mitad de camino). No es la idea de este directorio tener más de un técnico en las eliminatorias”, agregó el dirigente.

Bielsa, que será el vigésimo séptimo entrenador extranjero y el séptimo argentino en dirigir a la Roja, llegará a Santiago acompañado por el preparador físico Luis María Bonini y tendrá como ayudante de campo a Ricardo Lunari, ex jugador de Universidad Católica. Por sus servicios, Bielsa percibirá 1,5 millón de dólares anuales –“una inversión”, según Mayne-Nicholls–, lo que lo convertirá en el DT mejor pago de la región.

Además, para aceptar el vínculo, el ex DT de la Selección Nacional exigió a la asociación chilena fuertes cambios en materia de disciplina, uno de los puntos más débiles del equipo trasandino, en infraestructura (remodelación de baños y canchas de fútbol) y también capacidad de mando ante los entrenadores de las selecciones juveniles.

El primer objetivo del ex técnico de Newell’s y Vélez en Chile será el pasaje para la cita de Sudáfrica. La selección chilena no juega un mundial desde Francia ’98, al que accedió bajo la conducción del uruguayo Nelson Acosta. Según trascendió, fiel a su estilo metódico y obsesivo, Bielsa ya había comenzado a pedir informes sobre distintos futbolistas chilenos la semana pasada.