La lesión que sufrió Ever Banega ante Olimpo no es tan grave como parecía en un primer momento, aunque el mediocampista deberá permanecer inactivo durante quince días, lo que significará que recién podrá volver a jugar cuando Boca visite a Newell’s, en la undécima jornada del Apertura.

El juvenil mediocampista recibió el miércoles un fuerte golpe de parte de Gustavo Pinto, por lo que fue retirado en camilla del campo de juego durante la primera etapa del partido que Boca le ganó 2-0 a Olimpo. En ese momento, los médicos temieron una lesión ósea por la forma en que se le dobló la pierna, pero luego de unas placas radiográficas efectuadas ayer se comprobó que sólo fue un severo esguince. Sin embargo, esa dolencia lo marginará del encuentro que el equipo de Miguel Russo deberá afrontar el domingo ante Banfield, el siguiente ante Gimnasia de Jujuy y de los dos compromisos ante San Pablo de los octavos de final de la Copa Sudamericana, tanto como local como en Brasil.

“Me muero por volver a jugar, pero tengo que estar tranquilo para poder recuperarme. Quisiera hacer la rehabilitación lo más rápido posible”, expresó Banega. Su reemplazante seguramente será Sebastián Battaglia.