DEPORTES › RODRIGO RONCERO, PILAR DE LOS PUMAS
Fue destacado por Loffreda como una de las figuras clave del equipo, pero se lamenta de que “acá se olvida todo”.
› Por Adrián De Benedictis
El Mundial de Rugby en Francia lentamente comenzó a ser historia, pero lo realizado por Argentina será muy difícil de olvidar. El tercer puesto alcanzado por primera vez ya quedó en la historia grande. Y para ese logro hubo un hombre que fue fundamental. A los 30 años, Rodrigo Roncero ha conseguido además ubicarse entre los más reconocidos del mundo. El jugador del Stade Francais se ha consolidado como uno de los mejores pilares izquierdos del mundo. El desembarco en su actual club francés lo terminó de moldear como un rugbier de categoría, luego de comenzar su incursión europea en el Gloucester de Inglaterra. Iniciado en Deportiva Francesa, Roncero ahora ha adquirido la tranquilidad de haber llegado a lo más alto.
–¿Qué tan grande era el sueño de llegar a mezclarse con las potencias antes de partir hacia Francia?
–En nuestro interior siempre existió ese sueño de conseguir algo grande. Si bien sabíamos que iba a ser difícil, creíamos en nosotros y en lo que podía dar cada uno. Esa era la fuerza más grande que teníamos. El paso para dar era gigante.
–¿Y cuáles fueron los hechos más importantes que rescatás?
–Hubo varias cosas que marcaron el camino de Los Pumas. Lo que sucedió con (Martín) Gaitán (un problema cardíaco lo obligó a abandonar el plantel), la lesión de José (Núñez Piossek), fueron hechos muy fuertes que se sintieron mucho en la intimidad del equipo. Creo que el grupo se hizo más fuerte con esos episodios. Y luego, el envión que nos provocó ganarle a Francia en el debut fue realmente clave, porque en ese momento sabíamos que se nos abría la llave para lo que venía después. Esos fueron dos hechos que, para mí, dejaron una marca.
–¿Qué factor fue el más preponderante para llegar al podio?
–El compromiso tanto dentro como fuera de la cancha. El respeto y la humildad que teníamos entre nosotros. Pero también hay que decir que no desmerecíamos a ningún rival, para nosotros todos los que teníamos enfrente eran de cuidado, porque también tenían sus armas para ganar. El hecho de no sentirnos más que ninguno nos ayudó para ir siempre desde atrás a buscar los objetivos.
–¿Cómo ves el futuro de Los Pumas, ya sin la conducción de Marcelo Loffreda?
–No quiero pensar todavía en eso. Ahora hay que disfrutar todo esto, ya habrá tiempo para pensar en lo que viene. Acá rápidamente se olvida todo y no se vive el presente. Yo todavía quiero sentir el placer por lo que logramos.
–Y el hecho de que el propio Loffreda te haya marcado como uno de los jugadores más importantes que tuvo el equipo, ¿qué te genera?
–Siempre es lindo el reconocimiento, y es un orgullo muy grande viniendo del entrenador de uno. El también le ha dado mucho a este plantel y se merece la oportunidad que tiene para trabajar en el exterior.
–Con este resurgimiento del rugby, ¿cómo pensás que debe ser aprovechado para poder ser aplicado desde las bases?
–Esto es un poco la consecuencia de todo lo que se viene construyendo. Me parece que todo esto sirve para decir “acá estamos, el rugby argentino está bien presente”. Ahora que se sienten los responsables a definir todo en los escritorios, nosotros ya hicimos nuestra parte y sería bueno que haya continuidad en la dirigencia.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux