Con 38 equipos, seis de ellos argentinos, la 49ª edición de la Copa Libertadores comenzará esta tarde en Sarandí, cuando Arsenal reciba a Mineros de Venezuela en un partido de la ronda inicial, que entregará seis plazas para la fase de grupos.

Boca, el último campeón, buscará repetir el título nuevamente de la mano de Juan Román Riquelme. River perseguirá, como en cada edición, el anhelo de volver a levantarla luego de más de diez años, esta vez con un plantel renovado y con Diego Simeone en el banco. San Lorenzo es todo ilusión e intentará darle la espalda a su historia, mientras que Estudiantes buscará sacar a la luz sus hitos coperos para dar el batacazo. Lanús, con el envión del título local, también dará lucha desde la primera fase.

Se jugarán 138 partidos y finalmente el 2 de julio se sabrá cuál será el más grande del continente. El puntapié inicial se dará esta tarde, desde las 19.30, en Sarandí, cuando Arsenal, por primera vez en su historia, sea parte del torneo más importante de América, recibiendo a Mineros de Venezuela. La revancha será el próximo martes y el ganador de la llave ingresará al Grupo 8 que completan Fluminense de Brasil, Libertad de Paraguay y Liga Deportiva de Ecuador.

“Hay muchos equipos mejores que Arsenal, como los había también en la Sudamericana, pero a veces el que termina primero en la fase de grupos tiene un mal día en la eliminatoria y se queda en el camino. Por eso no la va a ganar el mejor sino el más eficaz e inteligente”, afirmó Alfaro. Lanús, el otro de los seis equipos nacionales que arrancará la competencia en la primera fase, visitará el jueves a Olmedo de Ecuador y definirá su suerte el próximo martes como local. El ganador ingresará al Grupo 2 que integran Estudiantes, Danubio de Uruguay y Deportivo Cuenca de Ecuador.

La primera fase se extenderá hasta el 12 de febrero y la completan: Llave B: Cruzeiro (Brasil) ante Cerro Porteño (Paraguay); Llave D: Atlas (México) ante La Paz (Bolivia); Llave E: Cienciano (Perú) frente a Montevideo Wanderers (Uruguay) y llave F: Chicó FC (Colombia) frente a Audax Italiano (Chile). Los ganadores se unirán a seis de los ocho grupos y jugarán la segunda ronda del 12 al 23 de febrero.

Los equipos más poderosos de la Argentina tendrán rivales similares. Boca, en el Grupo 3, tiene definidos a Colo Colo de Chile y a Unión Maracaibo de Venezuela, mientras que espera por el vencedor de la Llave D, posiblemente el Atlas de México. River, en tanto, es cabeza del Grupo 5, que completan Universidad Católica de Chile, Universidad San Martín de Perú y América de México.

Por su parte, San Lorenzo jugará en el Grupo 1 contra Real Potosí de Bolivia, Caracas de Venezuela, y el ganador de la Llave B entre Cruzeiro de Brasil y Cerro Porteño de Paraguay. Además de los argentinos, los equipos brasileños y los mexicanos aparecen como los más serios candidatos a quedarse con la Copa. De los cinco representantes de Brasil, San Pablo, por historia y por el refuerzo de peso internacional que supone el ex hombre del Inter, Adriano, asoma como el más peligroso. Los mexicanos, en tanto, que continúan considerándose invitados pero cada vez son más protagonistas de las instancias finales, presentan al América –finalista de la Sudamericana e integrante del grupo de River– como el equipo más fuerte.