Diego Maradona no quiso quedar afuera del conflicto que se generó el martes entre el presidente de River, Daniel Passarella, y el titular de la AFA, Julio Grondona. Y ayer se despachó como es su costumbre. “Si están viejos, tienen que irse”, enfatizó el ex técnico de la Selección Argentina, que se puso del lado del dirigente del club de Núñez al sostener que “Passarella le dijo las cosas que hay que decirle a Grondona”. Sin embargo, Maradona fue contundente cuando señaló las consecuencias de la discusión en el Comité Ejecutivo de la entidad madre del fútbol argentino. “Que no quepa la menor duda de que River lo va a sufrir en la cancha. Somos revanchistas y a la vuelta de la esquina te la hacen pagar. Nos conocemos desde hace prácticamente treinta años, y a Passarella se la van a hacer pagar”, afirmó.

Además, pese a que está a punto de viajar a Emiratos Arabes Unidos para hacerse cargo del Al Wasl, con el que tiene firmado un precontrato, Maradona no perdió la oportunidad para despacharse contra Sergio Batista, su sucesor al frente del combinado nacional. “Con la mayor y las juveniles retrocedimos mil pasos. Da pena esa situación porque habíamos ganado un respeto y una calidad humana muy buena y muy grande, que esta gente (por Batista y los técnicos de los seleccionados menores) la está tirando por la ventana”, remarcó el diez.

“A mí se me criticaba todo y lo de hoy, que es un mamarracho, no se critica”, comentó en referencia a los cuestionamientos que recibió por haber convocado a poco más de cien jugadores durante su ciclo al frente de Argentina, y que Batista ya lleva 81 citados en ocho meses. Maradona enfatizó especialmente en la ausencia de Carlos Tevez y consideró que “hay que estar alcoholizado para no ponerlo en la Selección”.

Pero ya lejos de la camiseta celeste y blanca, y a punto de cumplirse un año del Mundial de Sudáfrica, cuando alcanzó los cuartos de final con Argentina, Maradona volverá a dirigir en un territorio inusual para el fútbol, como son los Emiratos Arabes Unidos. Aun así, se mostró ilusionado y consideró una “experiencia maravillosa” la chance de ser entrenador de Al Wasl.