Unos dos mil hinchas de Boca les pusieron emoción a las tribunas del Vicente Calderón en la celebración del centenario del Atlético Madrid, pero todo el estadio alentó al equipo argentino. En 2000, cuando Boca le ganó al Real Madrid la Copa Intercontinental en Tokio, el triunfo fue celebrado por los hinchas del conjunto rojiblanco como propio. Por eso, el estadio del río Manzanares recibió al equipo argentino con calor y pasión “para que no se sientan visitantes”, confió un hincha a una radio española. “Son las dos grandes hinchadas del fútbol hispano”, añadió orgulloso otro hincha. Desde casi una hora antes el estadio entero entonaba el celebre “y dale Bo, y dale Boca y dale Bo...”, dejando claro además su odio deportivo eterno por el Real Madrid. La improvisada hinchada de Boca sostuvo el aliento a su equipo todo el partido, incluso cuando sufrió el gol de Torres.