“Por un instante, cuando llegó el descuento de Roberto Carlos, se me cruzó por la cabeza lo de la final de Milan contra Liverpool. Ese día también ganábamos 3 a 0 y nos empataron”, reveló ayer Hernán Crespo, el goleador de la Selección Argentina, recordando el partido del miércoles, en el que también conquistó dos goles, como aquella noche del 25 de mayo en Estambul. “En ese momento se me vinieron muchas cosas a la mente. Es que después de perder la final de la Champions League no tenía ganas ni de ponerme los botines para jugar. Por suerte, esta vez todo fue diferente.”
El delantero aseguró que “se está gestando algo importante” en la Selección. “Este proceso comenzó con (Marcelo) Bielsa y continúa ahora con (José) Pekerman. Estamos muy felices por clasificar, pero además ganándole a Brasil”, señaló.
“Estoy muy orgulloso de este grupo por clasificar al Mundial de Alemania. Lo que me pone aún más feliz es que lo logramos superando ampliamente a Brasil en todas las líneas. Jugamos un primer tiempo increíble y redondeamos un partido soñado”, afirmó Crespo.
“Argentina fue muy superior a Brasil. Creo que quedó claro quién manda en Argentina”, dijo el delantero, que un día antes del partido había propuesto “demostrarles a los brasileños que en el Monumental manda la Argentina”. Y reconoció una deuda con el público. “La verdad es que no podíamos fallarles a los hinchas que se mataron por sacar una entrada. Y estoy seguro de que se fueron tan conformes como nosotros.”
El goleador prometió más. “Ahora que estamos en el Mundial tenemos el objetivo de tomarnos revancha de lo que pasó en el 2002. La del miércoles fue una gran noche, pero espero que no haya sido la última.”