La Federación Agraria ya está lista para el próximo lockout, cuya fecha sería anunciada hoy luego de una reunión con la Mesa de Enlace. Así lo indicó ayer el titular de la entidad, Eduardo Buzzi, quien participó de una “audiencia pública” en el Senado organizada por los principales referentes de la UCR, la Coalición Cívica y el socialismo. El escenario montado por la oposición le sirvió al dirigente agropecuario –acompañado por otros miembros de la FAA– para relanzar su embestida contra el gobierno nacional de cara al próximo lockout. “No somos los piquetes de la abundancia, ni sojeros que queremos seguir enriqueciéndonos. Mañana (por hoy) se determinará alguna forma de protesta”, disparó Buzzi, quien también criticó la decisión del Ejecutivo de modificar el sistema de cartas de porte, que les sacó a los federados esa fuente de recaudación. Por su parte, el titular de la UCR, Gerardo Morales, denunció que el Gobierno apunta a la “destrucción” de la Federación Agraria.

La Mesa de Enlace se reunirá hoy para definir nuevas medidas de fuerza. Buzzi señaló que probablemente se avanzará en la no comercialización de granos y descartó impulsar cortes de ruta. Sin embargo, aclaró que los productores “están muy calientes” y hay quienes quieren volver a los cortes. La Federación también propondrá un acto en Leones, Córdoba, para el próximo 20 de febrero, día de la Fiesta Nacional del Trigo. “De esta foto seguramente dirán que hacemos oposición. Que digan lo que quieran. Ojalá existieran otros escenarios –que no sean los cortes de ruta o las asambleas– donde poder discutir”, destacó Buzzi.

Si bien los ruralistas tienen todo listo para volver al lockout, este año estará signado por las elecciones legislativas de octubre, y los representantes de las entidades agropecuarias, participen directamente o no, apostarán al desgaste del oficialismo y a sumar agua (votos) para su molino. No por nada en su discurso, además de hablar sobre la situación de los productores, incorporaron como destinatarios de sus palabras a los “consumidores” y la clase media, quienes se verían perjudicados por la gestión kirchnerista.

Así lo manifestó Buzzi, quien señaló que durante esta campaña agropecuaria habrá un millón de hectáreas menos de trigo y maíz, sumado a la falta de fertilizantes en las tierras, lo que traerá aparejada una menor productividad. “Esto no es sólo por la sequía. Fue por decisión de los productores frente a la situación de inestabilidad”, indicó el titular de la FAA, quien agregó que los perjudicados serán, justamente, los consumidores.

Quien se le sumó a esta idea fue el diputado de la Coalición Cívica Francisco Ferro: “Este año no habrá trigo suficiente para el consumo local. La política de escasez en la producción llevará a un aumento de los precios”, vaticinó el legislador, en línea con las palabras de la Federación Agraria.

Buzzi aprovechó para criticar la decisión del Gobierno de modificar el sistema de las cartas de porte. “Se está dando la señal de que todo aquel que piensa diferente es castigado. No vamos a aceptar silenciosamente esta persecución”, aseveró. Quien fue más allá en su alocución fue Pablo Orsolini, vicepresidente de la FAA: “Estamos ante la próxima camada de desaparecidos, productores desaparecidos como en la década del ’90”.

Por su parte, el radical Gerardo Morales –que estuvo acompañado por sus correligionarios Ernesto Sanz y Oscar Aguad, los socialistas Rubén Gustiniani y Silvia Augsburger y el senador Samuel Cabanchik y la diputada Fernanda Reyes de la CC– indicó que la gratuidad de las cartas de porte, “más que un beneficio para el productor, que le representa un ahorro del 0,05 por ciento en sus costos, es una persecución directa hacia la Federación Agraria”.

Frente al escenario de conflicto para este año, Buzzi –quien se maneja con un guardaespaldas desde que tuvo un cruce con militantes de la JP Evita– remató: “No somos golpistas ni destituyentes. Nosotros en la Dictadura poníamos los exiliados, no los ministros”.

–¿Está hablando también por la Sociedad Rural? –le preguntó este diario.

–No –respondió, aunque no quiso ir más allá para no polemizar con la entidad que ahora es socia de Federación Agraria.