El Gobierno abrió la licitación para la compra de 10.000 máquinas validadoras del Sistema Unico de Boleto Electrónico (SUBE). Los oferentes fueron Telecom, para sorpresa de muchos empresarios, y la UTE conformada por Metronec (del Grupo Roggio), Siemens e Indra. El presupuesto para la adquisición de estas máquinas es de 53 millones de dólares. El año que viene se comprarán otros 7400 equipos y en una etapa posterior se adquirirán otras 17.400 máquinas, ya que el proyecto prevé que cada colectivo tenga un equipo a la subida y bajada de los pasajeros.

A partir de las condiciones establecidas en los pliegos de licitación, las pymes fabricantes de este tipo de tecnología se quedaron afuera del proyecto. Las empresas nucleadas en Cadieel presentaron esta semana un petitorio a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner reclamando la participación de capitales nacionales pymes dentro del SUBE. La semana que viene se abrirá la quinta y última licitación. Si se suman todos los pliegos, está en juego un negocio superior a los 80 millones de dólares.

“Telecom no tiene antecedentes en la provisión de estas máquinas, sí en el hosting, donde también se presentó. Da la sensación de que la ‘telco’ se presentó para dejarle el camino a las tres grandes”, señaló a este diario un ex director de Telecom y actual dirigente empresarial. Los oferentes deberán realizar una prueba piloto en los próximos días, a través de la colocación de una serie de máquinas validadoras en distintas unidades de colectivos.

Los pliegos de licitación de las máquinas validadoras exigían que los oferentes tuvieran un patrimonio neto de 15 millones de dólares, lo que prácticamente dejó afuera a cualquier pyme del sector. “La industria argentina tiene capacidad tecnológica suficiente para participar del proyecto. Vale aclarar que al menos seis pymes fabricantes de sistemas y equipos expendedores acreditan 30.000 equipos instalados”, señaló la cámara que nuclea a las empresas del sector (Cadieel) en un petitorio presentado a la Presidenta.

Las empresas que forman parte de la UTE cuentan con equipos fabricados en sus propias filiales pero también suelen importarlos. Por ejemplo, Siemens trabaja con la compañía Microelectrónica, que trae al país las validadoras con subsidios de la República Checa. “Brasil también subsidia la exportación de este tipo de máquinas, lo que nos perjudica”, aclaró Claudio Kramer, titular de Cadieel. La empresa brasileña sería APB Prodata.

La semana pasada, Ricardo Jaime, secretario de Transporte, aseguró que el objetivo del Gobierno es utilizar las máquinas ya instaladas en algunos medios de transporte compatibles con la tecnología licitada. Esas empresas son Metrovías (con la tarjeta Monedero), del Grupo Roggio; el Ferrocarril Belgrano Norte, de Ferrovías; y el Grupo Plaza, que tiene equipos de la empresa Siemens. Por eso la UTE que compite contra Telecom aparece como la favorita para llevarse el negocio.