Vie 04.09.2009

ECONOMíA  › EL BLOQUE K DEL SENADO ENVIO EL PROYECTO A COMISION

El impuesto tecnológico, a boxes

La ley que modifica los impuestos a los productos electrónicos se hace esperar y el tratamiento del proyecto promete más episodios. El jefe del bloque kircherista en la Cámara alta, Miguel Angel Pichetto, marcó que hubo un “error” que provino de una modificación al boceto original que se introdujo en Diputados y pidió que el proyecto vuelva a ser tratado en la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Se trata de la protección a la producción de aires acondicionados de hasta 18 mil frigorías, lo que beneficiaría a una empresa en particular. La oposición pretende que se revea todo el proyecto, pero el oficialismo aspira a que sólo se trate puntualmente la cuestión de los aires acondicionados. Por su parte, sectores empresarios importadores y otros no radicados en Tierra del Fuego se quejan, mientras que los industriales fueguinos apoyan al proyecto.

Luego de la frustrada votación del miércoles, la oposición había justificado su ausencia en el recinto por “fallas en el proyecto”, entre las que remarcaron el “desliz” del que se refiere Pichetto. Los senadores del Acuerdo Cívico y Social solicitaron “volver a tratarlo desde cero”. En cambio, el oficialismo pretende que el trabajo en Comisión tenga como único objetivo subsanar este error puntual.

El problema apareció por el cambio que se produjo durante la sesión en Diputados sobre los aires acondicionados que serían protegidos por la medida. El proyecto original indicaba “hasta 6 mil frigorías”, pero en el recinto se modificó a 6 mil toneladas, que implica 18 mil frigorías. La oposición marcó que se estaba beneficiando a una empresa en particular, aunque desde el oficialismo desconocen el argumento. Según el ACyS, implicaba beneficios de 30 millones de dólares para una sola empresa.

Además, continúan las críticas desde los importadores y empresarios que no radican en Tierra del Fuego. Carlos Simone, de la Cámara Argentina de Máquinas de Oficina, Comerciales y Afines, indicó a Página/12 que “no es la política industrial correcta” y que se “está perjudicando a consumidores, empresas y trabajadores en pos de beneficiar a un puñado de firmas fueguinas”. En cambio, Alejandro Mayoral, presidente de la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica, destacó que se podrá favorecer a “más de cuatro mil trabajadores de Tierra del Fuego”.

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