El total de dinero circulante, más los depósitos públicos y privados, a la vista y en cajas de ahorro (denominado M2) registró un saldo promedio en el segundo trimestre del año de 206.260 millones de pesos. Representa un crecimiento interanual de 17,8 por ciento, alza que se encuentra por debajo del límite superior de 19,4 que establece el Programa Monetario del Banco Central. En forma trimestral, el M2 creció 4,4 por ciento. La entidad que conduce Mercedes Marcó del Pont explica en su informe trimestral que entre los factores que motivaron el alza frente al período enero-marzo se destacaron las compras de divisas del Central por las liquidaciones de los exportadores del agro, movimiento que responde a un factor estacional.

Además, resalta el crecimiento del crédito al sector privado. En este último aspecto, las entidades financieras incrementaron el ritmo de expansión interanual de los préstamos en pesos al sector privado, pasando de 12,6 por ciento en marzo a 19,2 en junio. En cambio, “los depósitos a plazo fueron el factor más importante de contracción del M2 en el trimestre, tras registrarse aumentos tanto de los pertenecientes al sector privado como del sector público”, indica el BCRA. Más allá de este incremento, la insuficiencia de colocaciones a largo plazo es una de las causas de la escasa penetración crediticia, sobre todo de aquélla dirigida a la producción. Para el Central, la variación interanual de M2 en junio de 2011 estará en torno del 19,3 por ciento.

El crecimiento de los depósitos en pesos, según la entidad, les permitió a las bancos aumentar el crédito al sector privado manteniendo niveles de liquidez adecuados. “En este escenario, las tasas de interés de corto plazo se mantuvieron relativamente estables, con un ligero aumento de las pagadas por los depósitos a plazo mayoristas”, explica.

En el informe, se destaca que “para fortalecer la dinámica del crédito orientado a la actividad productiva, a comienzos de junio el BCRA resolvió habilitar un mecanismo por el cual pone a disposición de las entidades financieras fondos a través de adelantos por un plazo máximo de cinco años”. Se refiere a la reciente línea crediticia a tasa fija financiada con redescuentos. Con una óptica distinta a la que presentaba la conducción anterior del Central, la entidad busca resaltar la relación entre el rol de la autoridad monetaria y el estímulo a la actividad productiva, más allá del cuidado del valor de la moneda.