Fue un excelente inicio de mes para la Bolsa porteña. Los datos positivos que se conocieron en los Estados Unidos sobre su nivel de actividad fogonearon una suba en las principales plazas financieras del mundo. El mercado local se sumó a la tendencia, beneficiando especialmente a los títulos públicos. Como resultado, se encuentran algunas perlitas de la jornada. El rendimiento del bono Global 2017, el título que fue entregado a los tenedores institucionales en el canje de deuda, se ubicó por primera vez en un dígito, a 9,9 por ciento. En el segmento cambiario, el dólar se mantuvo equilibrado y al público quedó en 3,96 pesos. El Banco Central intervino marginalmente en el plaza, dejando su stock de reservas en 51.076 millones de dólares. Para hoy se espera una reducción de este monto, porque se afrontará el pago de 2300 millones de dólares del vencimiento del Boden 2012. Aun así, las reservas quedarán en un nivel elevado.

La tendencia positiva de Wall Street contagió a las Bolsas internacionales. El optimismo global estuvo vinculado con la publicación de buenos balances corporativos –de HSBC Holding y BNP Paribas– y con un crecimiento mayor al esperado de la actividad manufacturera en los Estados Unidos. A esto se sumó la suba del petróleo, cuyo tipo WTI pasó de 78,85 a 81,25 dólares el barril.

Ese contexto ayudó a la suba de los activos locales, en donde el Merval inició agosto con un alza de 2,4 por ciento y se posicionó a poco más de un uno por ciento de su máximo histórico. El cierre para el panel de empresas líderes estuvo en 2454 puntos. El volumen negociado también fue un indicador del mejor clima que acompañó la operatoria: se contabilizaron movimientos por 75,6 millones de pesos, casi tres veces el monto de días previos. Las subas dentro del indicador estuvieron encabezadas por papeles del Grupo Financiero Galicia (con el 6 por ciento), Petrobras (3,9), Banco Macro (3,7), Tenaris e Hipotecario (3,6) y Francés (2,4).

La mayor participación de los inversores se notó también en la mejora de los títulos públicos. En ese sentido, se destacó el desempeño del Global 2017, que se cotizó en la Bolsa a 381 pesos, llevando su rendimiento –que se mueve inversamente al precio– a 9,9 por ciento. Este título fue entregado en la reapertura del canje a los inversores institucionales como reconocimiento de los intereses caídos desde 2005. Además estuvo pensado para captar mil millones de dólares adicionales, aunque la emisión quedó trunca debido a que Economía no estuvo dispuesto a convalidar una tasa mayor a un dígito.

El dato fue seguido con atención tanto por el mercado como por el propio Gobierno, debido a que representa la tasa a la que podría salir el país en un futuro a buscar fondeo en el exterior. Este papel alcanzó en su debut, en el mercado secundario, una tasa de interés implícita de 13,1 por ciento.

El resto de los bonos operó en su mayoría en positivo. El cupón atado al PIB volvió a estar en lo más alto del podio, con un salto de 3,6 por ciento, mientras que el Descuento en pesos ganó 1,2 y el Par en la misma moneda deparó una ventaja del 1 por ciento. Junto con el contexto internacional, la cercanía del vencimiento del Boden 2012, cuyo cumplimiento es descontado por el mercado, impulsó las compras de bonos locales. El riesgo país que elabora la banca JP Morgan, en tanto, bajó a 677 puntos básicos.

Para hoy se esperan movimientos de precios en los títulos y mayor oferta en el mercado cambiario, a partir de que se abonen los 2300 millones de dólares correspondientes a la amortización de capital e intereses del Boden 2012. Los movimientos dependerán de si los inversores reinvierten parte de ese dinero en deuda pública en pesos. En tanto, desde el Central aseguraron que no se prevé una caída de las reservas por ese monto, a pesar de que se pagará con parte de ellas, ya que “muchos tenedores tienen cuenta en el Banco y no todos retirarán el dinero”.