La ministra de Industria, Débora Giorgi, se reunió ayer con las autoridades de la Asociación de Industriales Metalúrgicos, sector que se beneficia del 40 por ciento de las licencias no automáticas de importación, para solicitarles que no aumenten los precios y pedirles compromiso de inversión para incrementar la capacidad de producción. Por su parte, el secretario de Industria, Eduardo Bianchi, mantuvo un encuentro con los fabricantes de productos electrónicos (que también gozan de protección comercial) para evitar que haya complicaciones en la producción de las tres millones de netbooks que se repartirán a estudiantes secundarios por el programa oficial Conectar Igualdad que maneja la Anses.

Según fuentes que participaron de la reunión con los metalúrgicos, el Gobierno planteó que “la estabilidad de precios es una condición básica”. Además, hubo especial énfasis en mejorar el rendimiento del sector autopartista, que se beneficia de las licencias no automáticas que restringen la entrada de partes y piezas importadas y también de la “presión” que el Gobierno hace a las terminales automotrices para que integren más producción nacional. Sin embargo, en algunos casos los autopartistas no tienen la capacidad de producción suficiente para atender esa demanda. Por eso los funcionarios pidieron más inversiones.

Por otra parte, los empresarios del sector electrónico se reunieron con Bianchi para elaborar en conjunto una lista de piezas de netbooks sujetas a licencias que podrían complicar la fabricación de las computadoras previstas por el plan Conectar Igualdad. Son piezas muy específicas como etiquetas oficiales o un tipo particular de arandelas que no tienen reemplazo nacional. Industria monitoreará que esos productos puedan ingresar al país de forma ágil.