El viceministro de Economía, Roberto Feletti, afirmó ayer que las negociaciones con el Club de París se encuentran “muy avanzadas” y que, una vez resuelta esta operación, la Argentina podrá acceder a créditos comerciales. El funcionario realizó esta afirmación en una conferencia organizada por la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP). El equipo económico lleva a cabo por estos días las tratativas con las autoridades de ese grupo de países acreedores para terminar de definir la metodología de pago de lo adeudado por la Argentina. La intención oficial es alcanzar un acuerdo antes de mitad de año.

“Los bancos públicos europeos están decididos a darnos créditos comerciales para equipamiento, pero esta decisión está atada a un eventual acuerdo con el Club de París, que en el día a día lo está monitoreando la Secretaría de Finanzas con bastante éxito”, indicó Feletti. Lo que se está tratando de cerrar es el monto y los plazos de pago. Una fuente del Club afirmó hace unas semanas que la diferencia entre lo que ofrece Argentina y lo que reclaman los acreedores era sólo del 2 por ciento, pero el número final que se acuerde también dependerá de los plazos. La intención del gobierno argentino es extender el plan de pagos entre cinco y seis años, contra los 18 meses que pide el Club.

Feletti se refirió también a algunos de los objetivos a los que Economía espera arribar en el transcurso del año. Uno de ellos –según relató– es “llegar a una tasa de desempleo de 6,6 por ciento a fin de año y luego, con la puesta en marcha del plan industrial, reducirlo a 5 por ciento, eliminando así los factores del desempleo estructural”. Además, se mostró convencido de que se logrará equilibrar la inflación. “Así como de a poco se fue nivelando el nivel de gastos con el de ingresos, el propio crecimiento económico va a llevar a la Argentina a niveles más estables de convergencia”, aseguró el secretario de Política Económica.

El ministro aseguró que no aplicarán “políticas antiinflacionarias clásicas, que supongan contracción monetaria y fiscal”. “En cambio profundizaremos nuestra política de ingresos y la oferta de canasta básica”, agregó Feletti. Según su explicación, las políticas implementadas mejorarán los parámetros de inclusión social, aunque resulta indispensable seguir trabajando “para reducir la informalidad existente, que llega al 25 por ciento en establecimientos con más de diez empleados”.

La política de subsidios también ocupó un capítulo en la exposición del viceministro, que a su juicio “es compatible con la política de ingresos y no es un obstáculo para la inversión pública”. “Admito que hay inequidades, pero la política de subsidios se mantendrá y resulta de enorme trascendencia para muchos trabajadores que se movilizan en el transporte público desde distintos lugares del Gran Buenos Aires”, sentenció Feletti. Finalmente, instó a profundizar los lazos comerciales con Brasil y restó importancia a una eventual devaluación del real. “Impactará más en la demanda una desaceleración del crecimiento brasileño que una modificación del tipo de cambio”, aseveró.