ECONOMíA › SUSPENSIóN Y DURA DENUNCIA CONTRA MOLINOS
› Por Tomás Lukin
La AFIP suspendió ayer a la multinacional cerealera Molinos Río de la Plata del registro de operadores de granos. La firma se sumó así a otras exportadoras cerealeras como Bunge, Cargill, Nidera o Louis Dreyfus, que en los últimos meses habían perdido los beneficios fiscales que perciben por figurar en ese listado. A diferencia del resto de las empresas sancionadas al utilizar facturas apócrifas o triangular exportaciones con paraísos fiscales, Molinos incorporó un nuevo eslabón en su ingeniería fiscal nociva que le permitió eludir totalmente el pago del impuesto a las ganancias por sus exportaciones de granos. Se trata del abuso de un tratado impositivo que Argentina mantiene con Chile.
El esquema fiscal organizado por la empresa del grupo Perez Companc que detectó la AFIP durante una inspección en 2007 es novedoso y, según el Ministerio de Economía, “abusivo”. La primera parte de la operatoria se basa en la triangulación de exportaciones con tres subsidiarias uruguayas, Molinos Uruguay, Molinos Overseas Uruguay y Alimentos del Plata Uruguay, y en menor medida una peruana. Ese mecanismo se mantuvo hasta 2004 cuando la empresa incorporó un nuevo eslabón a su cadena de elusión.
A partir de ese momento, los beneficios de las operaciones se consolidan en Uruguay y son girados al Holding Molinos Chile. Allí, la firma chilena no debe pagar ningún monto en concepto de ganancias ya que está estructurada como “sociedad de plataforma”, que le permite no pagar el impuesto a la renta si ésta se generó fuera de su país. Finalmente, los dividendos se remiten a la dueña del holding: Molinos Argentina donde tampoco deberán tributar Ganancias. Gracias a la existencia de un tratado de doble imposición entre Argentina y Uruguay, que pretende garantizar que no se pague impuestos por el mismo concepto dos veces, esos dividendos no abonan el tributo al ingresar en el país. De esta forma, la empresa consigue elaborar una estructura tributaria que le permite evitar todo pago de impuesto a las ganancias por sus exportaciones de granos.
El organismo recaudador reclama a la compañía el pago del tributo correspondiente a 410 millones de pesos de dividendos percibidos entre 2004 y 2009. La empresa no reconoció esas diferencias y el caso pasó a la justicia. En un comunicado dirigido ayer a la Bolsa y la CNV, la firma cotizante aseguró haber cumplido con sus obligaciones fiscales e informó que, como sucedió con el resto de las empresas, se defenderá legalmente. La multinacional Molinos fue suspendida en su carácter de acopiadora de granos. Desde ayer la empresa pasó a pagar de 2 a 15 por ciento en concepto de las retenciones que se realizan por las ventas al mercado interno y deberá ingresar un IVA del 10,5 por ciento.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux