El gobierno de Brasil liberó ayer, a partir del otorgamiento de las licencias no automáticas de importación, unos 3 mil autos que estaban frenados en la frontera. Hoy habría otra entrega de permisos, confirmaron fuentes del sector. De cara a la reunión de mañana entre la ministra de Industria, Débora Giorgi, y su par brasileño, Fernando Pimentel, las terminales automotrices radicadas en el país se reunieron con la titular de la cartera industrial para acercarle los últimos datos sobre el estado de situación en los distintos puntos fronterizos, donde aún se acumulan unos 5 mil autos. Las firmas pretenden que el gobierno del país vecino se comprometa en respetar un determinado plazo, que rondaría los 4 días, para entregar las licencias de importación de vehículos terminados, a diferencia de la liberación discrecional que vino practicando últimamente.

“Ya asumimos que el nuevo esquema de comercio será con licencias no automáticas. Mientras el gobierno brasileño se comprometa a entregarlas siempre en un lapso preestablecido, los esquemas de producción y stockeo se pueden adaptar y funcionar sin problemas. El mayor inconveniente es la imprevisibilidad, que genera sobrecostos por el almacenaje de vehículos en ámbitos no propicios”, indicaron fuentes del sector automotor. En la última ronda de negociaciones, Argentina propuso que como máximo las licencias se liberen en 3 días, mientras que la delegación vecina contraofertó un lapso de 10 días.

Desde el sector automotor sugieren que la invitación de Pimentel a Giorgi para concretar en Brasilia la reunión ministerial implica que el gobierno de ese país mejorará su propuesta. Además, resaltan que ayer la situación en los distintos puntos fronterizos se relajó, ya que se liberaron unos 3 mil vehículos, principalmente de General Motors y Fiat. Los autos varados ahora llegarían a 5 mil, aunque en los próximos días estarían arribando por la vía marítima unas 6 mil unidades más. Hoy habría una nueva liberación de autos en la frontera.

En el Ministerio de Industria indican que la entrega de licencias por parte de Brasil “no compromete a nada a la Argentina”, y que el faltante de vehículos en el país vecino es la causa por la cual los autos varados en la frontera se movilizaron. Los representantes de las terminales se reunieron con Giorgi y le mostraron “cuál es la situación del sector: cuántas unidades están en la frontera, cuántas se han liberado y cuántas hay en proceso productivo para ser enviadas próximamente a Brasil”. Además, presentarán hoy su propuesta en relación al lapso para que Brasil libere las licencias, que sería de unos 4 días.

Desde Adefa interpretan que la aplicación de licencias no automáticas por parte del país vecino en el sector automotor, además de jugar como una fuerte carta de negociación para que Argentina relaje su política de administración de comercio, responde a “un problema de competitividad de la industria brasileña, que se ve afectada por la competencia asiática”. Según datos oficiales difundidos ayer, la actividad industrial en Brasil registró en abril una caída interanual de 1,3 por ciento, la segunda consecutiva. La baja fue de 2,1 en relación a marzo. Por eso los empresarios de Adefa señalan que las licencias le permiten a Brasil controlar el ingreso de vehículos provenientes de extrazona, mientras que, solucionado el conflicto bilateral, se podría establecer un canal preferencial para las importaciones desde Argentina.

De cara al encuentro ministerial con Brasil, empresarios metalúrgicos de Adimra expresaron su “apoyo al Ministerio de Industria en su defensa de la industria nacional y las gestiones que viene realizando para encauzar el comercio bilateral”. Por su parte, la junta directiva de la UIA se reunió ayer y destacó su “confianza en que ambos gobiernos llegarán a un acuerdo que permita destrabar la presente coyuntura”.