El sistema de declaración jurada anticipada de importaciones, mediante el cual el Gobierno reforzará la administración del comercio, entra hoy en vigencia. Eso implica que los importadores deben presentar, en forma previa al envío de la nota de pedido al exterior, un detalle a la AFIP sobre sus operaciones. El organismo recaudador distribuirá esos datos entre las dependencias adheridos al régimen, entre las cuales por ahora sólo figura la Secretaría de Comercio Interior. Si la declaración jurada recibe alguna “observación”, el empresario no puede ingresar esa mercadería, de modo que, para poder operar, deberá realizar un trámite en el organismo correspondiente. El nuevo régimen funcionará en forma paralela a las licencias no automáticas de importación (LNA) que maneja Comercio Exterior.