“No existe ninguna restricción ni se creó ningún impuesto, lo que hay son mayores controles”, afirmó el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray. Después de presentar los datos de la recaudación (ver aparte), el funcionario afirmó taxativamente que el Gobierno no “pondrá topes” para las compras con tarjetas de crédito en el exterior. Echegaray explicó que, por el momento, las compras de pasajes y paquetes turísticos que se hacen en pesos no estarán sujetas al cargo del 15 por ciento a cuenta del pago del Impuesto a las Ganancias y Bienes Personales. También dijo que aquellos que compren objetos para consumo personal con tarjeta fuera del país pagarán el 15 por ciento de anticipo sobre esos impuestos, pero no aranceles aduaneros. Sin embargo, en el organismo indicaron más tarde a este diario que si las compras exceden los 300 dólares o los 150 si fueron realizadas en el Mercosur estarán sujetas al arancel como cualquier otro producto.

Ese arancel tiene una alícuota del 50 por ciento del precio sobre el excedente de 300 o 150 dólares. Es decir, sobre una compra de 400 dólares en Miami, se pagan 50 de arancel. Echegaray intentó explicar que la AFIP no pondrá la lupa sobre “los artículos de uso y consumo personal que forman parte de lo que trae el viajero”. Dijo que esos bienes “no tributan”. Así respondió en una entrevista televisiva ante la consulta de si un viajero debería declarar la compra de un cochecito de bebé. “Nos enfocamos en los casos de gente que entra determinadas mercaderías en cantidades importantes, de nivel comercial importante, de valores que estén facturados por la tarjeta de crédito”, indicó el funcionario. Es decir, los cruzamientos de datos que haga la AFIP entre los consumos declarados a la Aduana al ingresar al país y los resúmenes de tarjeta posteriores al viaje serán sobre casos que puedan inducir el ingreso de mercadería para su comercialización. De todos modos, en el organismo aclararon que cualquier compra por arriba de los 300 o 150 dólares debe ser declarada y pagar el arancel correspondiente.

“Las personas que cumplen la ley y declaran lo que ingresan al país no van a tener ningún inconveniente. Mientras tengan una conducta transparente no existen limitaciones” para comprar con tarjeta en el exterior, afirmó el recaudador. Lo que se busca, afirmó, es combatir el “enanismo fiscal”.

El “enanismo” es una práctica difundida para evadir el pago de impuestos, donde los individuos se esconden en categorías tributarias que no reflejan su verdadera capacidad contributiva. La AFIP identificó una cantidad significativa de personas de alto poder adquisitivo que realizan varios viajes al año, aunque sus ingresos y bienes declarados no permiten explicar esos gastos fuera del país. Para limitar ese canal de evasión el organismo decidió comenzar a cobrar en forma anticipada y generalizada una parte del Impuesto a las Ganancias y Bienes Personales. Así, por cada 100 pesos que se consuman con tarjeta de crédito y débito fuera del país, se efectúa un cargo de 15 pesos que será destinado al pago de esos tributos. La medida alcanza a todos los residentes argentinos sin discriminar por su condición como contribuyente (autónomos, monotributistas o trabajadores en relación de dependencia).

El titular de la AFIP afirmó que la medida tiene fines recaudatorios indirectos al mejorar “la formalidad fiscal” y reconoció que desincentiva los consumos en el exterior. Además de mejorar la posibilidad de cobrar esos impuestos, en el organismo recaudador consideran que forzará a los individuos que evaden y fugan divisas a utilizar sus dólares guardados “abajo del colchón” o los llevará a comprar moneda extranjera en el mercado negro, donde deben pagar un sobreprecio en lugar de acceder al tipo de cambio oficial.

La AFIP estima que las situaciones donde será necesario reintegrar los anticipos del 15 por ciento correspondientes a las operaciones con tarjetas fuera del país serán escasas. Los individuos que consideren que se encuentren en esa situación deberán recurrir a una agencia de la AFIP para hacer el reclamo correspondiente. El organismo evaluará cada caso. Sin embargo, la AFIP continúa sin ofrecer precisiones sobre cómo será el procedimiento para devolver los fondos ni en qué plazos. Respecto de los empleados en relación de dependencia que pagan Ganancias, Echegaray aseguro que realizará un “cruce sistémico de información” con los empleadores para garantizar que se computen los anticipos por compras en el exterior al pago del impuesto y, por lo tanto, se reduzca la retención mensual que realiza la empresa.

Ante la consulta sobre la posibilidad de que el organismo extienda el sistema de anticipos a la compra de pasajes y paquetes turísticos, Echegaray respondió: “Si compran vía tarjeta de crédito o débito y se factura en moneda extranjera, está sujeto al pago anticipado de Ganancias. Si lo paga acá en pesos argentinos, es una operación que por el momento no está alcanzada”.