La AFIP informó ayer que secuestró 525 mil anteojos de seguridad que no estaban en regla, por un valor en el mercado de 10,5 millones de pesos. “La mercadería estaba destinada a fines comerciales, pero no cumplía con la normativa vigente que ampara la importación de ese tipo de productos” informó la AFIP a través de un comunicado. Las gafas de seguridad proceden de Taiwán y son de marcas de primera línea. Fueron secuestrados en tres depósitos particulares del Gran Buenos Aires. “Los anteojos son los requeridos en algunos trabajos específicos o prácticas deportivas, dado que protegen la visión de riesgos ambientales, de impactos de diferentes elementos o de salpicaduras de productos químico,s entre otros agentes nocivos para la vista. Por ello deben cumplir estrictas normas de seguridad que el ingreso irregular no permite controlar”, explicaron desde la AFIP. Una de las empresas involucradas en la importación de los anteojos se encuentra siendo investigada por subfacturación de importaciones por el monto de 421 millones de dólares.